La localidad de La Cumbre, en el Valle de Punilla, lleva contabilizados unos 30 focos de incendios forestales y rurales que consumieron un número importante de hectáreas en pocas semanas.
Estos focos, en su gran mayoría, tuvieron su origen en horas de la noche y bajo condiciones climáticas que llevan a las autoridades a pensar que fueron provocados de manera intencional.
La cantidad de casos, los horarios y otros indicios generan la impresión de que alguien está detrás de esos hechos.
En ese marco, el intendente Rubén Ovelar anunció que presentará ante la fiscalía de Cosquín la denuncia correspondiente, para que comience una investigación de estos hechos, que al momento tiene como único dato la presencia de una persona en una moto negra en la zona donde se produjeron algunos de los incendios.
“Un vecino ofreció una recompensa de $100.000 para quien brinde datos fidedignos sobre el presunto autor o autores de los incendios”, expresó Ovelar avalando la iniciativa.
De acuerdo al informe presentado en rueda de prensa por Mariano Carmini, presidente de Bomberos Voluntarios de la localidad, los focos ígneos fueron iniciados en puntos específicos, tomando en cuenta la dirección del viento y la topografía del terreno, presumiblemente para evitar que el personal pueda actuar rápido para su extinción.
Pablo Aguirre, director de Defensa Civil municipal, confirmó que existe un patrón en cuanto a los inicios que incluyen la misma franja horaria, entre las 21 y las 24, llegando a ocurrir dos o tres focos simultáneos en distintos lugares de la zona rural.
No se descarta que la persona involucrada en estos incendios que han provocado importantes daños ambientales, tenga conocimiento del comportamiento del fuego en determinadas situaciones y sobre los mecanismos de respuesta para combatirlos.
* Con la colaboración de Luis Delsemme
