El Concejo Deliberante de Río Tercero sancionó por unanimidad una ordenanza que suspende por 60 días “en forma excepcional y extraordinaria” la habilitación de ferias de indumentaria organizadas por comerciantes de otras jurisdicciones.
La suspensión fue aprobada este jueves 2, el mismo día que en esta ciudad se abrieron dos ferias temporarias de indumentaria y calzado, una concentrada en un salón de eventos de la zona oeste, que llegó de la mano de un empresario de Córdoba capital, y la otra en el área céntrica, organizada por unos 50 comerciantes.
El arribo de la feria de Capital generó polémica en la ciudad, por llegar de afuera y en una época en la que comienza la venta de la temporada otoño–invierno.
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Varios comerciantes de Río Tercero solicitaron la suspensión de esta feria ante el Concejo Deliberante y el Departamento Ejecutivo, sin conseguir ese objetivo. Argumentaron que en tiempos de ventas en baja este emprendimiento que llega de afuera y habilitado por 11 días, debilita aún más su facturación y los perjudica.
No obstante, ni el Concejo Deliberante ni el Ejecutivo accedieron a suspender la feria. Los concejales se comprometieron a dictar una ordenanza que regule las ferias que llegan desde otras jurisdicciones.
El primer paso que dieron los ediles fue suspender la habilitación de nuevas ferias de calzado e indumentaria.
Ahora los ediles esperan que dentro de estos próximos 60 días tanto los comerciantes de ese rubro como el Centro Comercial, Industrial, de Servicios y Agropecuario de Río Tercero (Cecisa) formen una mesa de trabajo para avanzar en la sanción de una ordenanza que regule este tipo de emprendimientos comerciales.
Si el 13 de julio no se llega a un acuerdo para aprobar una nueva ordenanza, la que rige ahora por 60 días que suspende las ferias organizadas por personas de que no poseen domicilio fiscal en Río Tercero, queda sin efecto.
En los fundamentos, los concejales expusieron que “se evidencia la necesidad de dictar, reformular y actualizar el marco jurídico bajo el cual se desarrollan actividades comerciales, de comerciantes que no poseen domicilio fiscal permanente en el ámbito local”.
Agregan que “la ocurrencia de este tipo de habilitaciones, en el actual contexto de crisis económica genera inestabilidad, incertidumbre y preocupación entre los empresarios, comerciantes y emprendedores de la localidad”.
Y finalizan diciendo que “la realización de este tipo de eventos transitorios requiere del dictado de un instrumento normativo específico”.
