El intendente de Reducción, Jorge “Cacho” Grazziano, anunció un extenso operativo de seguridad para garantizar la tranquilidad de los miles de peregrinos que se esperan para la festividad del Cristo de la Buena Muerte el próximo 1° de mayo.
Se dispondrán alrededor de 350 efectivos pertenecientes a diversas fuerzas de seguridad, incluyendo bomberos, gendarmería, el Ejército, la Policía Federal, Antinarcóticos, la Caminera y el DUAR.
Este despliegue tiene como objetivo brindar acompañamiento a los fieles desde diferentes puntos de partida como La Carlota, Bengolea, Las Acequias y Río Cuarto.
Controles de seguridad cada 10 kilómetros y preparativos logísticos
En diálogo con radio Río Cuarto-LV16, Grazziano detalló que se establecerán controles de seguridad cada 10 kilómetros a lo largo de las rutas hacia Reducción, con el fin de que los peregrinos puedan transitar con seguridad tanto en la ida como en la vuelta. Además, se resolvió el corte de pasto a lo largo del camino, una medida importante para prevenir riesgos para los caminantes.
El intendente destacó la colaboración del Ente Descentralizado de Control Municipal (Edecom), la Guardia Ciudadana y la Policía de Córdoba para asegurar un trayecto seguro a pie.
Jornada de fe: misas y prohibición de música no religiosa
El jueves 1° de mayo será el día central de la peregrinación, comenzando con una misa al alba a las 6 de la mañana, tras la llegada de los primeros fieles, quienes serán recibidos con mate cocido caliente.
A lo largo de la jornada, se celebrarán misas cada hora, y la misa principal tendrá lugar al aire libre en la plaza central, presidida por el obispo Monseñor Uriona si las condiciones climáticas lo permiten.
Una medida significativa implementada desde el año pasado es la prohibición de música no religiosa durante el día central, enfocándose en un ambiente de recogimiento y devoción con la música de los parlantes de la iglesia.
Feria de artesanos, turismo religioso y un vínculo histórico con el papa Francisco
La festividad del Cristo de la Buena Muerte también representa un importante atractivo para el turismo religioso, con una feria de artesanos que se extiende por cinco cuadras y media a ambos lados de la calle principal, cuyos puestos ya se encuentran completos debido al creciente interés.
En un hecho anecdótico, el intendente Grazziano recordó la visita del papa Francisco a Reducción durante la dictadura, cuando el entonces padre Bergoglio visitaba a los curas tercermundistas Pugnata y Filipuzzi.
Reducción: un pueblo peregrino que abre sus puertas
Finalmente, Grazziano resaltó la creación de un cinerario junto a la iglesia, donde descansan las cenizas de fieles que deseaban tener su última morada en Reducción, lo que añade un valor significativo a la visita al pueblo.

“Toda la comunidad de Reducción está preparada para recibir a los peregrinos con calidez, transformando el evento en una experiencia espiritual, turística y social enriquecedora”, expuso el intendente.