A mediados de septiembre, se puso en marcha el programa “Compre sin IVA”, que reintegra a los compradores el Impuesto al Valor Agregado aplicado a la compra de productos de primera necesidad, siempre que se realice el pago con tarjetas de débito bancarias. Este plan tiene tres objetivos principales: estimular el consumo, contribuir a la recuperación del poder adquisitivo de los salarios y fomentar la bancarización y la formalización del sistema financiero.
El tercer objetivo es fundamental para comprender los acontecimientos en el sistema de pagos minoristas durante el mes de septiembre. Según los datos proporcionados por el Banco Central (BCRA), en el último mes se llevaron a cabo 210 millones de transacciones con tarjeta de débito, con un monto total de $1.358,67 mil millones. Esto resultó en un aumento del 25,2% en el número de transacciones y un incremento real del 8,6% en los montos en comparación con el mismo mes del año anterior.
Aunque ya se observaba un crecimiento en el uso de las tarjetas de débito en los meses previos, esta tendencia se consolidó de manera significativa desde la implementación del programa gubernamental.
En cuanto a la incidencia del programa, el Gobierno ha informado que, hasta el momento, ha reintegrado $36.840 millones a los beneficiarios después de tres semanas desde su implementación.
En el mes de octubre, a solo cuatro días de su conclusión, se informó que más de 17,5 millones de personas obtuvieron la devolución del IVA en la canasta básica, sumando un total de $68.800 millones.
Aunque aún no se disponen de datos publicados sobre las ventas en supermercados durante el mes de septiembre, las medidas previas implementadas por el Gobierno para impulsar el consumo ya han tenido un impacto positivo en las ventas. Según el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC), en agosto, los supermercados facturaron un 5,2% más en términos reales en comparación con el mismo mes del año anterior. Se presume que la incidencia del programa “Compre sin IVA” seguirá esta tendencia cuando se publiquen las estadísticas del mes de septiembre. No obstante, habrá que esperar a que el INDEC revele los datos oficiales para confirmar esta tendencia.
En cuanto a otros métodos de pago, según los datos del BCRA, en septiembre también se registró un aumento del 10,9% en el número de transacciones realizadas con tarjetas de crédito (113,1 millones de pagos), pero al mismo tiempo se observó una disminución real del 1% en el monto total operado, alcanzando un total de $1.354,6 millones.
Los pagos a través de transferencias, como los realizados desde dispositivos móviles, tuvieron un comportamiento volátil. Durante septiembre, se efectuaron 32,1 millones de operaciones por un total de $224,8 mil millones. A pesar de un aumento del 24% en el número de transacciones en comparación con el mismo mes del año anterior, el monto total facturado a través de transferencias experimentó una disminución real del 18,7%, ajustado por los efectos de la inflación.
Es importante destacar que la baja general en las transferencias se vio influenciada por las operaciones iniciadas en terminales de venta (Pos) con credenciales de tarjeta, que disminuyeron un 17,5% en número de transacciones y un 23,4% en el monto operado, totalizando $116,5 mil millones. Por otro lado, las transferencias iniciadas con códigos QR experimentaron un fuerte crecimiento del 206,5% en el número de operaciones, con más de 13 millones realizadas en septiembre, y un monto total operado de $56,8 mil millones, lo que representó una mejora real del 172,1% en comparación con el año anterior.
Los demás métodos de pago a través de transferencia, como las operaciones con claves aleatorias y el botón de pago, tuvieron una participación menor, con crecimientos y disminuciones específicas en el número de transacciones.
