En el Día Mundial del Ambiente, uno de los temas más preocupantes a nivel global es el impacto del cambio climático en la Tierra.
¿Cuáles son las consecuencias que produce a nivel nacional y en Córdoba? ¿Qué hacer para mitigarlo? ¿Cómo adaptarse a los cambios?
Estas son algunas de las preguntas que responde Maximiliano Burgos, especialista en química atmosférica del Departamento de Físico Química de la Facultad de Ciencias Químicas de la Universidad Nacional de Córdoba (UNC) e investigador del Infiqc-Conicet, acerca de las variaciones ambientales como consecuencia del cambio climático.
Burgos dijo que este fenómeno global hay que entenderlo desde distintos ámbitos y los estados son los que deben implementar políticas a corto, mediano y largo plazo para mitigarlo.
Para el científico, la raíz del problema está en el aumento de gases de efecto invernadero, una energía que parece insignificante, pero que a escala mundial produce olas de calor, lluvias más intensas, sequías, en eventos extremos cada vez más frecuentes.
En el caso de Córdoba, el especialista indicó que esta provincia genera gases de efecto invernadero no sólo por la industria, sino también por lo agropecuario.
Entre los temas ambientales que Córdoba debiera resolver, planteó que, si bien se comenzó a medir la calidad del aire, aún queda avanzar sobre ese punto.
Y marcó que faltan un sistema claro y moderno del reciclaje de los residuos para evitar los basurales a cielo abierto y campañas menos intermitentes para generar mayor conciencia.
Efectos globales con impactos locales
Burgos subrayó que los fenómenos globales tienen orígenes locales, pero después producen impactos mundiales.
Por ejemplo, si la temperatura global de la Tierra aumenta centésimas de grado, esto tiene un impacto muy importante en el clima de cada región.
Los impactos se ven en fenómenos meteorológicos que son cada vez más extremos: lluvias cada vez más fuertes que producen grandes inundaciones, olas de calor más intensas con mayor probabilidad de incendios y a la vez mayor dificultad para mitigarlos. Pero también, por regiones, se disminuyen precipitaciones, lo que provoca sequías más severas.
“Los fenómenos meteorológicos se intensifican. Y hay años en los que hay sequías, otros años se producen olas de calor y otros años, inundaciones”, agregó.
Pero también hay fenómenos particulares que impactan en lo global, como las emisiones de dióxido de carbono que generan las industrias y el parque automotor, y que también contaminan el aire.
“Los compuestos volátiles se distribuyen y producen compuestos tóxicos que pueden provocar problemas de salud, como irritación en las mucosas y afecciones pulmonares”, indicó.
El aumento de la temperatura media
De acuerdo a la Organización Meteorológica Mundial (OMM), el 2024 fue el año más cálido en la historia reciente del planeta.
Burgos confirmó que en 2024 la temperatura global aumentó 0,10 °C (una décima), lo que marcó un nuevo récord por sobre el valor récord del año anterior.
Los aumentos de las temperaturas anuales son décimas de grados, pero todas las proyecciones a largo plazo indican un incremento de la temperatura global en los próximos 70 años. Eso sería “una catástrofe”.
Impedir el alza dependerá de cómo se comporta el ser humano con respecto a las políticas de emisiones de gases y de cómo se implementen las mejoras en los procesos industriales para que sean más amigables con el ambiente.
Hay un dato: cuando se descubrió el agujero de ozono, en la década del ′60, esto disparó una gran cantidad de políticas a nivel global para reducir los compuestos clorados y fluorados que produjeron el problema.
“Hoy se está revirtiendo ese daño. Es una lección que hay que aprender cuando el impacto es global. Cuando los países se ponen de acuerdo en cuidar el ambiente, hay efectos positivos”, afirmó.
Cómo aminorar el impacto y adaptarse al cambio
A fines de 2024, Córdoba ingresó a la Alianza para la Acción Climática Argentina (Aaca), para la búsqueda de soluciones sostenibles y colectivas.
Burgos explicó que formar parte de estos organismos y tener las metas claras es muy importante, pero para lograrlas hace falta una inversión estatal muy fuerte.
Ya que cuidar el ambiente implica mejoras tecnológicas, campañas y legislaciones que incentiven a ciudadanos y a empresas a ser cuidadosos con el ambiente.
Está demostrado que parte de las soluciones de los problemas ambientales es estudiarlos y creer que esos estudios son reales.
Si bien Córdoba realiza campañas, aún falta mucha inversión en infraestructura. “El control tiene que ser muy fuerte”, subrayó.
Y agregó que hay un tema cultural para adaptarnos. Es importante respetar a la naturaleza como es. “Por ejemplo: ¿qué pasa con esa ropa que no se usa? Se termina tirando y tiene compuestos que son nocivos para el ambiente”, expresó
“¿Por qué tenemos tanto pinos en Córdoba? Si no es una zona de pinos. Cuando se reforesta, hay que incluir la flora de la región y que no se fuerce la biodiversidad del lugar", apuntó.
Y se preguntó: “¿Es cultural? En el fondo nos queremos parecer a otros lugares en vez de darnos cuenta de que tenemos un lugar hermoso para vivir y hay que mostrarlo".
El científico insistió en la importancia de respetar el ambiente para que “todos tengamos un mejor lugar para vivir”. Los problemas tienen que ser abordados por los gobiernos, que deben preocuparse y buscar soluciones para la sociedad.
Los residuos, un problema ambiental
El Día Mundial del Ambiente, organizado por el Programa de Naciones Unidas para el Ambiente, se celebra desde el 5 de junio de 1973 para concientizar a la sociedad sobre la importancia de garantizar la protección de los recursos naturales.
El festejo de este año se realiza en Corea, con un llamado a la sociedad para combatir la contaminación por plástico a nivel mundial.
En ese sentido, Burgos sostuvo que Córdoba tiene una problemática ambiental, como es la contaminación por los basurales a cielo abierto, y no hay un sistema claro y moderno de reciclaje de la basura para que no contaminen.
“Es mejor que antes, pero falta mucho. Si uno ve cómo se dispone de la basura en ciudades más modernas, Córdoba esta lejos de eso”, anunció.
Para el especialista, las campañas son intermitentes, se cambian los contextos y las personas no saben cómo separar, adónde disponer la basura. “Es un problema serio”, advirtió.
Burgos sostuvo que hacen falta concientización, educación y cestos para discriminar la basura, y una inversión para su reciclaje.
“Tiene que haber una política fuerte. No sirve tener contenedores si después el plástico se junta con el vidrio y se dispone mal”, señaló.