El intendente Daniel Passerini encabezó este martes en el Concejo Deliberante la apertura formal del proceso de reforma del Código de Convivencia de la ciudad de Córdoba.
En un acto que reunió a concejales de todos los bloques políticos, representantes del Poder Judicial, autoridades académicas, miembros del Ente Metropolitano Córdoba, organizaciones de la sociedad civil, vecinalistas, funcionarios municipales y referentes educativos, se dio inicio a una etapa de debate y construcción colectiva en torno a la normativa que regula la convivencia urbana.
“Debemos simplificar la normativa para una mejor aplicación y para que los vecinos puedan interpretar con más claridad las reglas de convivencia. Nuestro código tiene 279 artículos, de los cuales la mitad no tiene aplicación real”, afirmó Passerini durante su intervención.
Según precisó, la intención de su gestión es actualizar la normativa antes de fin de año y lograr un texto más claro, operativo y adaptado a las problemáticas actuales de la ciudad.
El Código de Convivencia vigente fue sancionado en 2016 mediante la ordenanza 12.468, en reemplazo del antiguo Código de Faltas, con un enfoque menos punitivo y más orientado a la convivencia ciudadana. Se trata de un compendio normativo que regula aspectos esenciales de la vida urbana, como el tránsito, la higiene, la protección ambiental, la bromatología, las habilitaciones comerciales y el uso de los espacios públicos.
A casi una década de su implementación, desde el Ejecutivo municipal se planteó la necesidad de revisar en profundidad la norma para mejorar su operatividad.
Passerini subrayó que la ciudad necesita “un código de participación y convivencia”, con aportes de todos los sectores sociales.
La propuesta incluye la eliminación de superposiciones y contradicciones normativas, la agilización de procesos administrativos y el fortalecimiento de los instrumentos de control para el cumplimiento de las normas.
Uno de los puntos destacados por el intendente fue la creciente conflictividad en entornos digitales. “Con el advenimiento de los medios digitales, muchas discusiones se potencian, deforman o desvirtúan y generan consecuencias en las personas”, indicó. En ese sentido, anticipó que la nueva normativa deberá incorporar disposiciones específicas para abordar las nuevas formas de interacción y conflicto que surgen en las plataformas digitales.
El intendente también puso énfasis en la necesidad de fortalecer el control de las faltas ambientales, con la formación de basurales como uno de los problemas principales. Este enfoque busca reforzar la responsabilidad ciudadana en la gestión de residuos y preservar el entorno urbano a través de normativas claras y mecanismos efectivos de fiscalización.
Otro de los ejes planteados por Passerini fue la integración normativa con los municipios del Ente Metropolitano Córdoba. “La visión metropolitana también integrará normativas, compartiendo decisiones para garantizar la convivencia de la gente”, expresó.
Con esta perspectiva, el nuevo Código de Convivencia procurará armonizar sus artículos con los marcos regulatorios de otros municipios y comunas de la región, favoreciendo una aplicación coordinada y efectiva de las normas en todo el Gran Córdoba.
Durante su exposición, Passerini también hizo referencia a la necesidad de recuperar y preservar el uso público de los espacios comunes. “Con una decisión importante generamos la recuperación de espacios públicos que fueron usurpados por sectores, por personas que al adueñarse del espacio público generan una situación de conflicto que alteran la convivencia”, señaló. Y agregó: “Los cordobeses queremos vivir mejor, los cordobeses queremos vivir en paz y fundamentalmente los cordobeses queremos vivir con un orden que nos garantice progreso y paz social”.
Un trabajo en conjunto

El proceso de actualización de este marco normativo se desarrollará a través de una serie de encuentros y mesas de trabajo con todos los sectores convocados. La intención es que los concejales y concejalas de los distintos bloques sean quienes definan los artículos del nuevo código, con base en los aportes recibidos durante el proceso de debate.
La revisión del Código de Convivencia también se orientará a mejorar la seguridad jurídica, facilitar la interpretación ciudadana y garantizar una normativa más clara, tanto en su forma como en su contenido. Esto incluye la revisión de ordenanzas acumuladas a lo largo del tiempo, la supresión de artículos obsoletos y la incorporación de nuevas disposiciones adaptadas al contexto social, económico y tecnológico de la Córdoba actual.
Además de Passerini, participaron del acto el viceintendente Javier Pretto; el vocal del Superior Tribunal de Justicia, Luis Rubio; fiscales generales; integrantes del Comité Interreligioso por la Paz (Comipaz); representantes de la Asociación de Magistrados; autoridades de universidades nacionales y provinciales; miembros de colegios y consejos profesionales; representantes de cuerpos deliberativos de municipios y comunas del Ente Metropolitano Córdoba; directivos de escuelas, vecinalistas y funcionarios del gabinete municipal.
La reforma del Código de Convivencia se inscribe en una agenda más amplia de transformación institucional impulsada por la gestión municipal, que apunta a reforzar la cultura ciudadana con un enfoque preventivo, educativo y metropolitano. Según se indicó, el nuevo código deberá reflejar los valores de respeto, responsabilidad y solidaridad en el espacio público y en el ámbito digital, como pilares fundamentales para una mejor convivencia urbana.