La fiesta de egresados de “Las Esclavas” fue un evento muy esperado para la promoción 2021. El estiramiento de las clases virtuales y del formato mixto hizo que este tipo de encuentros se convirtiesen en una especie de triunfo contra el coronavirus. Nadie esperaba que los contagios se dieran en ese entorno.
Con las canchas de fútbol habilitadas; los bares, boliches y grandes centros de compra funcionando en su plenitud; más el relajamiento generalizado que venían acusando las autoridades sanitarias de la provincia; la fiesta no parecía un evento desmedido, según comentaron padres y allegados al entorno del alumnado.
El ágape tuvo lugar en un exclusivo salón de eventos de barrio Villa Esquiú, en la zona noreste de la ciudad de Córdoba. El encargado del salón, de quien se preserva la identidad, le confirmó a este medio que “no se registraron contagios entre el personal”. Además, según la mirada de la misma fuente, se respetaron los protocolos.
La locación donde se realizó la fiesta de egresados tiene capacidad para 800 personas. A la fiesta de “Las Esclavas” asistieron 500, según detallaron desde esa empresa. “La gente no usa barbijos, igual que ocurre en la vía pública o en las canchas de fútbol o los bares. Han cambiado los niveles de prevención y lo vemos en todos los eventos, no sólo en este”, dijo la fuente consultada.
Sorteo abierto y baile de graduación
Por su parte, la promoción había organizado un sorteo de entradas a la fiesta dirigido al público, fiel a los estilos actuales de estos eventos. O sea que, a partir de las 23, se sumó un grupo de gente extra a la fiesta, aunque no está claro si el grueso de este ingreso extemporáneo estaba contabilizado entre los asistentes.
“En el salón hubo baile y por más que se indiquen de manera constante las normas de cuidado, lo cierto es que los jóvenes suelen ser reticentes a estas pautas. Y no es un problema sólo de los chicos: acá hacemos fiestas de todo tipo y es una conducta generalizada. Por eso desde el lugar respetamos protocolos y medidas de seguridad”, sostuvo el encargado y agregó que gracias a los cuidados “no hay contagiados entre los mozos”.
Las autoridades sanitarias habían indicado, en cuanto a las medidas de control, que lo recomendado era testearse antes y repetir las pruebas después de los eventos masivos. “Estos días, en los centros de testeos aumentó la actividad. Pero venía siendo muy baja en el último tiempo, a pesar de que habían vuelto a realizarse actividades con gran convocatoria”, señaló la secretaria de Prevención y Promoción de la Salud, Gabriela Barbás.
Se sabe que a la fiesta asistió una persona que había arribado al país desde Estados Unidos. Este habría sido el caso índice en el brote de las escuelas secundarias y hasta el martes por la tarde se estudiaba si era portadora de la variante Ómicron.
Una lista con más casos positivos
Tras la fiesta, los egresados de los colegios que participaron de la cena donde ocurrió el masivo contagio de coronavirus comenzaron a confeccionar una lista propia de casos positivos que incluye a graduados, padres y otros familiares que participaron de las cenas en salones privados.
Los jóvenes que prefirieron mantener el anonimato para “proteger a los colegios” contabilizaron con nombre y apellido más casos que los informados por el Ministerio de Salud.
A las 10 de la mañana de este martes, cuando la Provincia informaba 54 casos, los estudiantes contaban con 144 casos positivos. Por la tarde, el Ministerio de Salud informó 110 positivos.
El brote de coronavirus provocó la suspensión de todas las actividades en los establecimientos afectados, en donde se pidió a las familias “mantener la calma”. Consultados sobre cómo tomaron la noticia, un grupo de adolescentes admitió a La Voz que tomaron la situación “con humor” y como parte del riesgo de celebrar en pandemia el evento más esperado del secundario.
El después de la fiesta
“Acá no se contagiaron los invitados, porque sino habría sido generalizado y hubiera afectado al personal. Con seguridad todo pasó en el ‘after’. Es muy común que los chicos sigan la fiesta hasta por varios días”.
Esto fue lo que aventuró el encargado del salón donde se realizó la fiesta de egresados. El encuentro entre los jóvenes, se sabe, duró varias horas más desde que se cerraron las puertas del salón. Era además el momento más ansiado, porque sólo asistían los estudiantes y sus invitados.
Allí no hubo protocolos, como suele ocurrir en este tipo de festejos privados. Sin embargo, todo continuó con la misma modalidad que ya se había gestado la cena de egreso, con baile, bebidas y festejo por el fin de un ciclo.
El “after” se realizó durante el feriado del 8 de diciembre. Algunos estudiantes volvieron a sus domicilios a las 6 de la mañana y otros rompieron esa marca. Luego de esa jornada, todo el alumnado de la escuela Esclavas –no sólo los estudiantes de 6°– se reunieron durante la entrega de las libretas. Cuando empezaron a circular las primeras versiones sobre contagios a raíz de la fiesta, empezó a crecer la preocupación entre los padres de la secundaria porque sus hijos habían compartido la jornada del viernes.
En estos eventos también se contagiaron estudiantes de Las Pías, del San Ramón Nonato y de las Adoratrices que fueron invitados de los chicos y chicas de las Esclavas.
El club del barrio, también afectado
El Club Atlético General Paz Juniors es un centro deportivo que alberga, en sus distintos equipos, chicos provenientes de estos centros educativos. Allí también hubo que aislar a 44 jugadores que pertenecen a tres categorías distintas. Se trata de dos plantillas de básquet y una de handball.
“Tenemos dos categorías de básquet que no pueden ir al club por este brote, y una de handball. En todos los casos, hubo jugadores que estuvieron en la fiesta de egresados de Las Esclavas, o en un after”, explicó el presidente del club, Dante Felauto.
Todos los integrantes de estos equipos están realizando hisopados. Además, deben guardar aislamiento preventivo. “Gracias a Dios hasta ahora todos los chicos están dando negativo en los testeos. Sólo hay tres infectados, que son los que asistieron a las fiestas”, dijo Felauto.
La decisión de “parar” a los equipos tuvo que ver con que los tres jugadores que asistieron a los festejos de Las Esclavas compartieron entrenamientos con sus compañeros. Por eso, el club tuvo que tomar la determinación de frenar las actividades.
