El juez de Control Juan Manuel Fernández López confirmó la elevación a juicio de la enfermera Brenda Agüero como única autora material de las muertes de bebés en el Hospital Materno Neonatal de Córdoba.
Brenda Agüero llegará al banquillo con un figura criminal inédita en la historia judicial de Córdoba: ser considerada responsable de los asesinatos en serie de recién nacidos en un hospital público provincial. La figura penal por la que irá a juicio Agüero es la de homicidio calificado por procedimiento insidioso reiterado, en contexto de serialidad criminal (5 hechos) y homicidio calificado por procedimiento insidioso reiterado, en contexto de serialidad criminal en grado de tentativa (8 hechos).
Entre las pruebas que terminaron de darle forma a la figura penal que endilgó el fiscal Raúl Garzón y confirmó Fernández López se resalta el resultado del peritaje multi e inter disciplinario que concluyó que hubo asesinatos en serie, que el o la asesina pudo actuar en soledad y que el perfil criminal destaca más que particularidades psicológicas la oportunidad y el conocimiento específico que requería la mecánica utilizada para los ataques a los recién nacidos.
Los indicios que se suman para sostener la acusación contra Brenda Agüero son:
- Presencia física
- Oportunidad
- Mala justificación
- Mendacidad
- Actitud anterior y posterior
- Personalidad moral
Entre los numerosos detalles del proceso, el juez Fernández López destaca uno, que contribuye a uno de los indicios: la actitud posterior. “Llama la atención la anotación que efectuara la imputada en la historia clínica tras individualizar el presunto diagnóstico que presentaba el recién nacido que consignó en ese documento que, siendo las 11:35, se observó al recién nacido frío y con ‘cianosis peribucal’ aclarando que había permanecido en los brazos de la abuela ‘todo el tiempo’. Este agregado emerge, a todas luces, sospechoso y puede ser interpretado como un intento de la imputada de dejar asentado, en constancias médicas, datos que eventualmente le resultaran favorables”, consigna el juez.
“Téngase presente que la consignación escrita en la respectiva historia clínica de cómo permaneció el bebé durante su estadía en la sala de recuperación (si en la cuna, o en los brazos de la madre o de la abuela) carece de relevancia médica habida cuenta de que no alude a ninguna particularidad con significancia clínica que amerite ser considerada para posteriores diagnósticos y tratamientos”, sigue el razonamiento, que lo lleva a interpretar que “la sorpresiva indicación que efectuara en el documento clínico puede ser interpretada, en lo que aquí interesa, como el infructuoso intento de ‘preparar el terreno’ para poder sobrellevar y/o sobreponerse a las futuras, y razonables, consecuencias penales de su comportamiento. Se trata, en términos sencillos, de una clara ‘manifestación posterior al delito’, direccionada a confundir y desviar las sospechas sobre otras personas (para el caso, hacia la abuela)”.
Sobre la presencia, está comprobada en la serie de ataques, pero el juez destaca uno de los hechos, el de la muerte de la beba Franchesca, hija de Justine Bustamante. , “Ha quedado demostrado -mediante prueba pericial y técnica- la causa eficiente de la descompensación (hiperpotasemia, probablemente de causa exógena), la que se produjo durante el turno laboral de Agüero. A ello se le suma que quien se encontró a cargo del binomio madre-hijo una vez producido el alumbramiento y mientras se encontraban cursando la recuperación fue, precisamente, Agüero; así como también que, conforme dichos de la madre de Franchesca, sólo ella fue vista manipulando a la recién nacida luego de su ingreso a la sala UTPR. De ello existe, también, prueba objetiva, tal como las anotaciones que fueran efectuadas por la imputada en la historia clínica correspondiente, en la que puede leerse el deterioro vivenciado por Franchesca pese a las excelentes condiciones de salud que presentó al nacer y durante la hora posterior a dicho acontecimiento (las que también fueron consignadas por Agüero). De tal guisa, el espectro de autores posibles, atento a la evidencia incorporada, se ve reducido a ella, la única persona de la que existe registro de su actuación y desempeño en el lapso existente entre los dos acontecimientos jurídicamente relevantes (nacimiento – descompensación)”, razona el magistrado.
Para el abogado querellante que representa a las familias de tres bebés muertos y uno que sufrió ataques en el Neonatal, Carlos Nayi, “todos estos elementos constituyen una suma de evidencias que sin necesidad de prueba directa, como testigos presenciales, son suficientes para acreditar la participación penalmente responsable de Agüero”.
Nayi remarcó que Brenda Agüero actuó en soledad a la hora de los asesinatos, pero contó con las colaboraciones funcionales, que hicieron posible que llegara a una serie criminal de cinco hechos consumados y otros ocho intentos, que podrían haber tenido el mismo resultado.
“Hubo un grupo de trabajo que obró de manera sincronizada, la que mató, por un lado, los que encubrieron, por otro, y los que omitieron denunciar. Sin la contribución de alguno de estos actores esta cadena de hechos criminales jamás se hubiera podido llevar adelante. De haber mediado una actitud responsable, comunicado a la Justicia, no haber ocultado ni destruido prueba, se hubiera evitado este camino macabro”, opinó el abogado penalista, que impulsó con fuerza el avance de la causa.
La defensa de Agüero, que luego de varios cambios de manos terminó en la representación liderada por el exfiscal Gustavo Nievas, fracasó en sus apelaciones en esta segunda instancia, en la Justicia de Control. Pero mantiene la inocencia y cuestiona las conclusiones y las evidencias que ofrece la instrucción penal.
“Este caso no tiene ninguna prueba directa, no hay ninguna persona que le haya visto a Brenda inoculando, hay solamente una madre que dijo que la vio manipulando su bebé y la pericia médica hospitalaria estableció que ese bebé murió de muerte natural no tiene prueba indirecta, gente que diga, sí, yo la vi a Brenda inoculando, ocultando no tiene eso, los indicios que tenía como los famosos indicios de los PDF ya se desmoronó absolutamente con la pericia interdisciplinaria que se llevó adelante hace unos 30 días razón por la cual lo único que le queda es el indicio de presenciabilidad donde efectivamente Brenda estaba presente pero estaban presentes también en el Neonatal 4.000 personas. ¿Cómo no va a tener cercanía con el bebé si ella trabajaba ahí? Pero también hay 400 personas en la misma situación”, enfatizó, en su crítica, el abogado Nievas.
La defensa técnica sí obtuvo una victoria al quitar del escenario probatorio un elemento indiciario que era valorado inicialmente como un elemento revelador: el hallazgo entre las descargas de documentos del celular de Agüero de información sobre aplicaciones de potasio. Lo que pudo probar la defensa es que Brenda no buscó y descargó ese material, sino que lo recibió reenviado por WhatsApp y que ese contenido formaba parte de una capacitación que hizo como enfermera.
La defensa, a su vez, planteó que se destruyeron pruebas al practicarse modificaciones en el Centro Obstétrico del hospital Materno Neonatal, que fue “la escena del crimen”, tanto para las cinco muertes como los otros ocho ataques a recién nacidos que se le atribuyen a la enfermera detenida en Bouwer.
Para Nievas, esto es de gravedad. “La investigación comprende inicial y básicamente la protección y preservación del lugar de los hechos. Además, dicha preservación busca garantizar también el debido contralor de la defensa técnica”, manifestó.
Las modificaciones surgieron como producto de garantizar el cuidado y la transparencia en la manipulación de los recién nacidos y fue una respuesta del Ministerio de Salud provincial, entonces, a la crisis de confianza que surgió tras la difusión de la serie criminal en ese centro de salud.
Qué dice la defensa de Brenda
Una vez conocida la elevación a juicio de la causa, los defensores de Brenda Agüero, Juan Riveros Gustavo Nievas, emitieron un comunicado expresándose al respecto.
“Celebramos la elevación a juicio de la presente causa, donde todos los imputados van a ser juzgados en un mismo proceso y por la misma cámara del Crimen y así, de un juicio oral y público que se caracteriza por la oralidad, la inmediatez, el interrogatorio y contrainterrogatorio de testigos, va a surgir toda la verdad”, señalaron.
Asimismo, dijeron que esperan que “aquellos que se dedicaron a ocultar lo que estaba sucediendo en el Neonatal, ahora no se ocupen de impedir que esta causa llegue a juicio en un tiempo razonable”.
“Dejamos en claro los abogados que la defendemos a Brenda Agüero y el resto del equipo interdisciplinario que trabaja en esta causa (médicos, psicólogos, psiquiatras, peritos informáticos, etc.) creemos en su inocencia. No hay una sola prueba directa que involucre a Brenda Agüero, solo una muy débil prueba indiciaria que puede servir para elevar esta causa a juicio, pero de ninguna manera imponer una condena”, sumaron.
Asimismo, dijeron que en el juicio oral y público, van a conocer “el rostro de los mas de 100 testigos que fueron interrogados en la Jefatura de la Policía sin control de la defensa”, y que se podrá escuchar lo que tenían para decir los testigos que propuestos por la defensa de la enfermera y que –aseguraron– fueron “desechados”.
“Pero principalmente –agregaron–, es la oportunidad que tenemos para saber por qué se descartó cualquier medio de prueba que condujera a otra línea de investigación”.
Según explicaron, los abogados defensores quieren saber por qué no se investigó la desaparición de partidas de remedios (donde podría haber existido remedios contaminados, vencido o experimentales) en el hospital, o el “desmantelamiento de la escena del crimen, modificándose absolutamente el Centro Obstétrico”, o la “manipulación ante la opinión publica de la información contenida en el celular de Brenda Agüero”.
“Esperamos que toda la sociedad pueda escuchar los CD que se encuentran incorporados a la causa, de donde surgen diálogos entre los funcionarios de la máxima jerarquia del Ministerio de Salud y del Hospital Neonatal, de donde surgen cómo manipulaban la información para direccionar la investigación a un culpable que tenía que aparecer para salvar a la parte medica”, indicaron en el escrito.
También dieron que esperan que no haya “más demoras ni artilugios” para que el juicio sea llevado adelante, “porque toda la sociedad cordobesa necesita saber la verdad sobre estos eventos tan dolorosos y sensibles, que afectan no sólo a las madres de los bebés, sino a la familia de quien injustamente esta detenida desde hace casi dos años”.
Finalmente, adelantaron que realizarán una presentación ante el Superior Tribunal de Justicia “para que se ocupe de hacer cumplir la normativa vigente”.
“Tratándose de un juicio que se definirá por jurados populares, (queremos que) se impida que la información que surja de los operadores judiciales continúe haciendo llamados a linchamientos sin juicio y sin justicia. Debemos ser responsables, mesurados y entender que ni todo es marketing jurídico ni todo se mide en términos económicos, porque del seno de la sociedad surgirán los 12 ciudadanos que definirán la verdad y es necesario que los cordobeses no seamos manipulados, para que sin resentimiento y desde el sentido común y exclusivamente en base a la prueba judicial, alcancemos la verdad de lo ocurrido”, finalizaron.
