Aunque aún no hay certezas sobre la muerte de cinco bebés que nacieron sanos en el Hospital Materno Neonatal de Córdoba, fuentes que tienen acceso tanto a la investigación administrativa como a las judiciales confirmaron a este medio que los indicios que tienen en sus manos hacen sospechar de la responsabilidad de una persona que es parte del cuerpo de enfermería.
Esta persona está apartada de su trabajo junto a otros ocho empleados que tuvieron acceso a las salas de atención neonatológica en las fechas en las que ocurrieron las cinco muertes bajo sospecha.
Hospital Neonatal de Córdoba: le apuntan a una integrante del equipo de enfermería
La mujer, como los demás trabajadores que están en el círculo más pequeño bajo investigación, tiene una dispensa: sigue cobrando el sueldo, pero se le exime de la obligación de asistir a trabajar. En esta condición se encuentran desde mediados de junio.
Desde la cartera sanitaria prefieren no dar mayores precisiones sobre sus sospechas. La información fue publicada, en calidad de primicia, por el programa Mediodía en Mitre, de Radio Mitre. Allí se anticipó, también, uno de los detalles que más llama la atención: la principal apuntada sería una profesional con un currículum impecable, con una amplia formación y excelentes referencias.
Desde la Provincia prefieren manejarse con cautela porque entienden que revelar mayores datos sobre la posible sospechada podría interferir en la investigación judicial. Y resaltan que la evidencia recolectada es una suma de indicios –firmes, para el relevamiento administrativo- que requieren de mayor investigación para construir un caso penal.
Además, aseguraron que ya fue remitida a la Justicia toda la información requerida, desde las historias clínicas de todos los casos hasta las filmaciones del hospital desde marzo a esta parte.
El Materno Neonatal es uno de los centros de salud pública con mayor red de videovigilancia. En total cuenta con 25 cámaras, dispuestas principalmente en los ingresos y en las Unidades de Terapia Intensiva (UTI). El monitoreo –explicaron fuentes muy cercanas al expediente- es para evitar el robo de bebés. Sin embargo estiman que las filmaciones no serán de gran ayuda en este caso porque los hechos ocurrieron en salas comunes reservadas para niños sanos. Allí no existen estos dispositivos.
