De una nómina total de 22.928 policías, 14.729 oficiales y suboficiales están disponibles para tareas operativas, como el patrullaje o la realización de operativos. Representan el 64 por ciento del total. En este grupo, predominan los que trabajan con el régimen de guardias de 24 horas con 48 horas de descanso posteriores. Eso hace que por día sean menos de 5 mil los policías que están disponibles para hacer seguridad.
Este número, para el ministro de Seguridad de Córdoba, Juan Pablo Quinteros, es insuficiente: “Faltan policías por eso nosotros hemos decidido hacer un cambio de cúpula policial como no sucedió en los últimos 20 años, revivimos la policía barrial, también tenemos la firme voluntad de que todo el personal policial esté abocado a tareas de seguridad”, dijo. Y vinculó la violencia presente en los robos a las drogas. “Los robos violentos es una clave importante, antes no se daban con tanta violencia, ahora vemos una violencia inusitada y creemos que es por la presencia de drogas. Vamos a intentar que Córdoba sea un territorio hostil para el narcotráfico”, marcó.
Quinteros resaltó la transparencia en ofrecer los números reales de la dotación policial. “Hay una situación que por primera vez en 40 años de democracia la policía ha mostrado los números de cuánto es la fuerza policial, de cuántos están en calle, han mostrado toda la nómina de personal”, enfatizó. El Gobierno provincial pretende incrementar la seguridad en la calle con las guardias urbanas municipales y la incorporación al sistema público de los vigilantes y la tecnología de los privados. Pero para avanzar con las agencias privadas antes tiene que regularizarse la situación en el oficina de control de la seguridad privada, donde hay dos empleados imputados presuntamente por pedir coimas para conceder habilitaciones, un tema que está siendo investigado por el fiscal Anticorrupción Franco Mondino.
Hay otros 3.752 empleados policiales que no salen a la calle, pero son trabajadores en actividad. Desempeñan roles profesionales y técnicos, con grados y jerarquías policiales, y hay civiles que operan cámaras de seguridad y son auxiliares administrativos.
Dentro de este número resaltan los 2.337 policías en tareas no operativas (TNO), una categoría que incluye a quienes son excluidos de tareas callejeras porque no están en condiciones de salud, recibieron alguna sanción o son investigados por el Órgano de Control de las Fuerzas de Seguridad.
Son policías que están trabajando, pero no están uniformados ni armados. Generalmente hacen tareas administrativas.
De este número total, 2.259 están en TNO por razones médico laborales. Son motivos clínicos o psiquiátricos que les impiden realizar tareas efectivas de seguridad y portar armas.
Apenas el 4 por ciento de los policías en TNO –78 casos– son por retiro preventivo de arma, a pedido del Tribunal de conducta o de la Justicia. Se trata de casos que están en etapas muy primarias de investigación, que luego se definirán por su reincorporación si las causas son desestimadas o avanzará hacia una licencia o el inicio de un trámite de baja.
Estos grupos, sumados, son la fuerza efectiva presente, según la contabilidad del Ministerio de Seguridad provincial: 18.481 hombres y mujeres policías.
Hay un número importante de policías en actividad que no prestan servicio para la Policía de Córdoba porque están comisionados en la Fuerza Policial Antinarcotráfico (FPA), que depende del Ministerio Público Fiscal (MPF) o el Equipo Técnico de Acción ante Catástrofes (ETAC), que depende el Ministerio de Seguridad, y está asignado al combate de incendios, asistencia ante inundaciones u otros siniestros. Son, según la planilla de enero de este año, 1.928 policías, con cambio de destino a alguna de estas áreas.
Los que no trabajan en ninguna parte son 2.519 policías que aún cobran todo o parte de sus sueldos. Son aquellos que están de licencia, fueron puestos en disponibilidad, están en situación pasiva, tienen cautelares en curso o la baja en trámite. Cobran un 30 por ciento, un 75 por ciento o el sueldo completo, según cada caso.
Para la nómina completa se los debe considerar. El número, con ellos adentro, llega a 22.928 empleados policiales.
