La Justicia cordobesa ordenó a la Provincia que mida y determine el nivel de contaminación ambiental al río Suquía causado por el desborde de cloacas en barrio Villa Páez, de la ciudad de Córdoba.
Desde la fiscalía del Distrito 1 Turno 6, a cargo de José Bringas, se giró un exhorto a la Secretaría de Ambiente de la Provincia para que mida, determine e informe a la brevedad la contaminación con materia fecal que está cayendo al río.
Desde la cartera oficial habrían respondido que la medición se hará en breve pero el informe final demorará.
Silvina Scarpino, secretaria de la fiscalía, informó a La Voz que se exhortó a la Secretaría de Ambiente que efectúe la constatación a la brevedad y la informe a la Justicia.
Hay dos causas judiciales en esta historia.
Por un lado, el fiscal Tomás Casas investiga qué empresa o firmas rompieron los caños de cloacas que terminaron causando el desastre ambiental en ese barrio. Fuentes judiciales indicaron que la causa está avanzada pero no se conocen imputaciones por ahora. En paralelo, hay otra causa abierta: la del fiscal Bringas, quien inició una investigación de oficio para determinar la contaminación que ese desborde está causando en el río Suquía, cuyo cauce llega hasta la laguna Mar Chiquita.
“No es una solicitud. La fiscalía ha realizado este pedido con carácter de orden para que técnicos de Ambiente midan qué contaminación está produciendo. Esa medición se hará en distintos lugares y deberá ser informada”, precisó la funcionaria a este diario. “A la vista está claro que se está produciendo una contaminación”, añadió.
Este informe que deberá hacer la Provincia no tiene relación con el informe ambiental que se solicitó desde el Municipio de la Capital a la Universidad Nacional de Córdoba.
La fiscalía de Bringas, a poco de iniciar la causa de oficio, solicitó a Policía Judicial (dependiente de la Fiscalía General) que envíe técnicos a medir la contaminación al río. Desde esta área se indicó que no se podía concretar esa medida y se recomendó tal tarea a Ambiente.
Desde la fiscalía fueron cautos respecto a las eventuales medidas procesales que se puedan adoptar posteriormente.
Relevamiento
Funcionarios de la Defensoría del Pueblo recorrieron ayer la zona del vertimiento cloacal en la calle Páez Molina esquina La Tablada que desemboca en el río Suquía para verificar los trabajos de mitigación que el municipio lleva adelante.
El organismo a cargo Mario Decara recibió en las últimas semanas varios reclamos que fueron tomados por el Instituto de Ambiente de la Defensoría del Pueblo (Inadep). Su director, Daniel Di Giusto, junto al Secretario de Gestión de Ambiental de la Municipalidad, Jorge Folloni recorrieron la zona.
Allí los funcionarios constataron los procedimientos de cloración que implementó el municipio para mitigar el impacto ambiental del vertimiento.
“El Inadep pudo comprobar también los procedimientos de regulación que llevan a cabo personal especializado para que los efluentes clorados no excedan parámetros sanitarios antes de su vertido final en el río Suquía”, señalaron desde la Defensoría
Atención sanitaria
Los operativos de asistencia del municipio revelaron que en Villa Páez, Alberdi y Marechal 637 viviendas están dentro de la zona sanitaria más comprometida, 292 familias se vieron afectadas por las aguas servidas en sus domicilios y siete aún tienen líquido cloacal en sus casas. Además otras cinco permanecen evacuadas en hoteles y 10 recibieron fondos de emergencia ya que tuvieron pérdidas totales.
La Secretaría de Políticas Sociales del municipio realizó el relevamiento y la entrega de kits sanitarios y de higiene. Además entregaron raciones de alimento, bidones de agua y se repuso el mobiliario y la indumentaria de los vecinos afectados.
En cuanto a la obra de reparación del caño cloacal, la Municipalidad informó que se trabaja en la última boca de registro en calle Arturo Orgaz entre La Tablada e Igualdad. Durante los próximos días se limpiará la cañería instalada.
