La glucosa es la principal fuente de energía para las células, y su regulación adecuada contribuye a prevenir complicaciones de salud como enfermedades cardiovasculares, problemas renales y trastornos neurológicos.
Una alimentación equilibrada, la actividad física regular y el manejo del estrés son factores clave para mantener la glucosa dentro de rangos saludables.
Algunas infusiones naturales, libres de cafeína y ricas en antioxidantes, despiertan el interés de la comunidad científica por su potencial en la regulación de la glucosa.
Una infusión tradicional que podría apoyar el equilibrio glucémico

El té de rooibos, conocido como la “infusión milagrosa” de Sudáfrica, está ganando popularidad en todo el mundo gracias a su sabor suave, sus propiedades antioxidantes y su potencial para mejorar la salud metabólica.
Originario del arbusto Aspalathus linearis, este té sin cafeína no sólo es una alternativa saludable al té tradicional, sino que también ha sido vinculado a la reducción del riesgo de padecer diabetes tipo 2, según investigaciones recientes.
El rooibos, que significa “arbusto rojo” en africano, es una infusión elaborada a partir de las hojas de un arbusto que crece exclusivamente en la región de Cederberg, Sudáfrica.
A diferencia del té verde o negro, el rooibos no contiene cafeína, lo que lo hace ideal para cualquier hora del día. Está disponible en dos variedades: rojo (fermentado) y verde (sin fermentar), ambas ricas en antioxidantes como la aspalatina y la nothofagina.
Beneficios para la salud: por qué reduce el riesgo de diabetes

Estudios científicos ya destacadon el potencial del té de rooibos para mejorar la sensibilidad a la insulina y reducir los niveles de glucosa en sangre, dos factores clave en la prevención de la diabetes tipo 2.
Un estudio publicado en la revista Phytomedicine encontró que la aspalatina, un antioxidante exclusivo del rooibos, mejora la absorción de glucosa en las células y reduce la inflamación, lo que podría prevenir el desarrollo de resistencia a la insulina.
Otro estudio, realizado por el Journal of Traditional and Complementary Medicine, demostró que el consumo regular de rooibos puede disminuir el estrés oxidativo, un factor relacionado con complicaciones diabéticas. Los polifenoles presentes en el té ayudan a proteger las células pancreáticas, responsables de producir insulina.
Además de sus efectos sobre la diabetes, el rooibos ofrece otros beneficios:
- Propiedades antioxidantes: combate los radicales libres, retrasando el envejecimiento celular.
- Salud cardiovascular: mejora los niveles de colesterol y reduce la presión arterial.
- Apoyo digestivo: alivia molestias estomacales y promueve una digestión saludable.
Cómo incorporar el té de rooibos
El té de rooibos es versátil y puede consumirse caliente o frío, solo o con un toque de miel, limón o leche. Para obtener sus beneficios, los expertos recomiendan tomar de 1 a 3 tazas al día. Se encuentra en supermercados, tiendas especializadas o en internet, Se puede encontrar en su forma natural, en blends con otros ingredientes y en forma de saquitos.
Aunque el rooibos es seguro para la mayoría de las personas, se recomienda consultar a un médico antes de consumirlo en grandes cantidades, especialmente si se está bajo tratamiento para la diabetes, ya que podría interactuar con medicamentos hipoglucemiantes.