La tensión arterial elevada o hipertensión está detrás de la mitad de los fallecimientos por accidentes cerebrovasculares y cardiopatías, la primera causa de enfermedad y mortalidad en los países desarrollados.
Su diagnóstico y tratamiento hicieron posible que, en los últimos años, haya disminuido de forma significativa el número de personas aquejadas por esta enfermedad. Los tratamientos actuales han contribuido a reducir la mortalidad por cardiopatías. Así, en 1980, el 31 por ciento de los adultos americanos, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), padecía hipertensión. En 2014, ese porcentaje había descendido al 18 por ciento.
Cambiar el estilo de vida es, en ocasiones, suficiente para mantener bajo control la presión arterial. Abandonar el consumo de tabaco, adoptar una dieta lo más saludable posible, hacer ejercicio regularmente, evitar el alcohol y consumir menos sal serían cambios indispensables.
El potasio, indispensable en una dieta cardiosaludable

En casi todas las cocinas argentinas hay bananas. Pero más allá de ser una fruta rica y accesible, muy fácil de comer y de trasportar para comer afuera, también es un alimento funcional con beneficios concretos para la salud cardiovascular.
Según la Fundación Española del Corazón, promovida por la Sociedad Española de Cardiología, el alto contenido de potasio de la banana ayuda a contrarrestar los efectos negativos del sodio y, por lo tanto, a regular naturalmente la presión arterial.
Una banana mediana aporta entre 375 y 400 mg de potasio, aproximadamente el 11% de la ingesta diaria recomendada. Además, contiene magnesio, fibra, antioxidantes y compuestos como la leucocianidina, que tiene efectos antiinflamatorios y protectores de la mucosa gástrica.
Pero la banana no es solamente buena para el corazón. Según National Geographic, la banana también:
- Mejora la digestión gracias a la fibra y almidones resistentes.
- Regula los niveles de azúcar en sangre al evitar picos de glucosa.
- Proporciona energía sostenida, ideal para deportistas o días exigentes.
- Refuerza el sistema inmunológico por su aporte de vitamina C y antioxidantes.
- Mejora el estado de ánimo al intervenir en la producción de serotonina gracias a la vitamina B6.
Otros alimentos que ayudan a controlar la presión
La banana no es la única que puede ayudar. El sitio especializado Cuerpo y Mente enumera otros alimentos útiles para mantener la tensión arterial estable.
- Legumbres: ricas en potasio, fibra y magnesio.
- Alcaucil: con efecto diurético natural.
- Agua de coco: rica en electrolitos naturales.
- Ajo y cebolla crudos: con propiedades vasodilatadoras.
- Canela: ayuda a mantener estables los niveles de glucosa en sangre.
- Semillas de cáñamo: fuente vegetal de omega-3.
Si bien ningún alimento reemplaza el tratamiento médico, incluir banana en la dieta puede ser un paso fácil y natural hacia una mejor salud vascular. En combinación con chequeos periódicos, actividad física y una dieta variada, puede marcar una gran diferencia.