La cordobesa C.G. (41) y su pequeño hijo G.R.G., de un año y diez meses, viajaron este lunes a Francia de manera compulsiva, a pedido del Tribunal Superior de Justicia de Córdoba (TSJ), que falló en febrero pasado a favor de M. R. (31), ciudadano francés y padre del niño que solicitó la restitución.
La mujer se había marchado legalmente de Francia el 28 de marzo de 2021 con G.R.G., nacido en ese país el 31 de diciembre de 2020, luego de denunciar por violencia de género a M.R., por entonces su pareja.
El TSJ resolvió el retorno del pequeño a París, pero la madre se opuso al considerar que están en riesgo su seguridad y los derechos del niño, cuyo “centro de vida” está en Córdoba, donde ha crecido desde los tres meses.
El abogado cordobés Juan Carlos Vega explicó a La Voz que C.G. viajó a Francia sin visa. “El viernes se realizó y entregó un acta notarial a la jueza Julia Rossi (encargada de ejecutar la orden de traslado del TSJ) donde se le comunica el riesgo de deportación que corre C.G. al viajar sin visa y que, como el padre no tiene la tenencia del niño, el riesgo es que este quede en manos de la seguridad social del Estado francés”, explicó Vega, copatrocinador de la mujer.
El letrado indicó, además, que abogados franceses ya trabajan para solicitar que C.G. tenga la custodia del niño también en ese país.
El caso
C.G. conoció a M.R. en 2017 cuando viajó a Francia a estudiar. En 2019 iniciaron la convivencia y decidieron tener un hijo.
La mujer relató a La Voz, días atrás, que desde el momento en que quedó embarazada se vio sometida a violencia psicológica y económica. “A partir del tercer mes fue un infierno. Todas las noches me mostraba bebés con malformaciones. Me decía que el bebé iba a nacer enfermo por mi edad”, contó en esa oportunidad.
Después del parto C.G. sufrió violencia física, que denunció en la Policía francesa y otras instituciones de atención a la mujer. “Cuando nació G. empezó el maltrato físico hacia mí, pero lo que me hizo tomar la decisión de buscar ayuda es cuando empezó el maltrato hacia G. Entre otras cosas, relató, el hombre tiraba los cigarrillos en la cuna.
Según consta en la causa, el 24 de marzo de 2021, el hombre le exigió que le entregara la documentación suya y del niño y la amenazó con matar al pequeño. C. G. realizó una nueva denuncia policial y M.R. fue arrestado durante tres días, momento en que la mujer se marchó del país con los papeles en regla, incluida la autorización de viaje del niño por parte del padre.
Un informe de la psicóloga y magister en neurociencia cognitiva y del comportamiento María Victoria Martínez, afirma que la madre y el niño sufrieron por lo menos tres episodios graves de maltrato físico y numerosos de violencia psicológica y económica desde que el bebé nació.
Cuatro meses después del arribo de C.G. a Córdoba, el progenitor solicitó la restitución internacional ante la Justicia cordobesa y el TSJ hizo lugar a la demanda condicionando la ejecución a una serie de medidas entre ellas, que el gobierno francés y el argentino garantizarán el regreso seguro del niño y de su madre a Francia.
El fallo del Tribunal Superior de Córdoba
El fallo del TSJ a favor del padre, de febrero de este año, desestimó una resolución de primera instancia de la jueza Rossi, quien había hecho lugar a la excepción prevista por el artículo 13.1.b. del Convenio de La Haya de 1980, que regula la restitución internacional de niños y niñas, y que aplica cuando se comprueba que están en riesgo los derechos del niño, fundamentalmente lo que se denomina su “centro de vida” (lugar, afectos).
Rossi había introducido en su resolución la “perspectiva de género”, lo que no fue considerado por el TSJ.
