El mismo día en que confirmó la realización del juicio al exministro de Seguridad de la Provincia Alfonso Mosquera por numerosos hechos de presunto abuso sexual y violencia de género, la Cámara de Acusación de Córdoba desestimó la causa en contra del exfuncionario municipal Gabriel Bermúdez que surgió por la denuncia de una mujer por supuestos actos indebidos en el ámbito laboral.
El tribunal de alzada integrado por los camaristas Maximiliano Davies (autor del primer voto), Patricia Farías y Carlos Alberto Salazar, por unanimidad, dispuso el sobreseimiento total de quien hasta principios de marzo de 2024 era secretario de Transporte de la Municipalidad de Córdoba, hasta que recibió la denuncia de “BMC” una trabajadora del mismo ámbito.
Si bien la defensa de Bermúdez había solicitado la desestimación por “inexistencia del hecho” con argumentos y prueba abundantes, el tribunal se inclinó por disponer el sobreseimiento por la duda, teniendo en cuenta que la investigación no dejaba margen para avanzar en indicios ni para dictar la falta de mérito.
“No hay margen dentro de la investigación que les permita salir de la duda” a los vocales, manifestó una fuente judicial.
A la vez que se pondera la investigación de la fiscal de Delitos contra la Integridad Sexual Ingrid Vago, se indica que ese margen de duda no puede ser superado.
La acusación se basaba en dichos de la denunciante referidos a manoseos y a una propuesta indecente en una oficina y no aportaba otra prueba. Si bien había una imagen de cámara de video que situaba a la mujer en el ámbito que había referido, eso no sirvió para situarla junto al entonces funcionario denunciado.
Además, una supuesta segunda víctima declaró e informó que no había sufrido ninguna acción desubicada de parte de Bermúdez.
La denuncia hablaba de un abrazo, tocamiento y una mano que se filtró debajo de la ropa por la espalda de la mujer. A la vez, señalaba que el denunciado le habría preguntado cuándo iban a concretar un encuentro sexual.
Lugar y momento
Más allá de los dichos en apoyo de la acusación, las abogadas defensoras Débora Ferrari y Macarena Centeno Guerrero (del estudio Gramática-Ferrari-Gramática) aportaron elementos que ayudaron a excluir a Bermúdez del lugar y el momento de los hechos.

Las letradas presentaron un trabajo minucioso que plantea una recontrucción de los hechos a través de una línea de tiempo. Allí se indica que Bermúdez difícilmente haya podido realizar el recorrido en ese lapso y estar en el lugar y el momento durante el cual podría haber ocurrido el encuentro denunciado.
Llamadas telefónicas de su móvil, la duración de esas conversaciones y la geolocalización a partir de las antenas de celular, ayudaron a dudar sobre la posibilidad de un contacto como indicaba la acusación.
A raíz de esta denuncia y al ser imputado por la Justicia, Bermúdez renunció a su cargo como secretario de Transporte de la comuna cordobesa.
Casi un año y cuatro meses después de soportar la acusación de “abuso sexual simple”, despojado de su cargo, el tribunal de la Cámara de Acusación dispuso su sobreseimiento total.