Un minucioso análisis pericial determinó que el incendio que afectó a la sede central de Apross habría tenido su origen en un desperfecto del sistema de iluminación LED del segundo piso del edificio.
Así lo revelaron los informes técnicos elaborados por Bomberos de la Policía de la Provincia y un ingeniero electricista electrónico designado como perito oficial, cuyas conclusiones fueron difundidas por la Fiscalía de Instrucción del Distrito I Turno 5.
Según el detallado informe del cuerpo de Bomberos, el punto de inicio del siniestro se ubicó específicamente en el cuadrante 3 de la denominada “zona Este (E)” del segundo nivel del edificio. En este sector, las llamas habrían comenzado sobre materiales combustibles dispuestos en los escritorios de oficina, desde donde el fuego se propagó mediante tres mecanismos distintos: conducción, radiación y convección.
Los investigadores destacaron un factor clave que aceleró la propagación del incendio: la rotura de los ventanales del piso generó un efecto de ventilación que aportó oxígeno adicional al fuego. Este fenómeno explicaría la intensidad alcanzada por las llamas, que desarrollaron un elevado poder calorífico, así como la formación de densas columnas de humo que rápidamente afectaron los niveles superiores de la construcción.
El informe de Bomberos descartó de manera contundente que el origen del incendio pudiera atribuirse a una combustión incandescente, como podría ser el caso de una colilla de cigarrillo mal apagada o el uso de incienso. Esta conclusión se basó en la ausencia de los patrones característicos que deja este tipo de ignición: una combustión superficial progresiva acompañada de abundante humo denso.
Sin embargo, los investigadores encontraron un indicio relevante: en la zona considerada como foco inicial del incendio se hallaron restos combustionados con marcadas oxidaciones correspondientes a dos plafones de la luminaria LED. Si bien este hallazgo permitió inferir la posibilidad de una falla eléctrica como causa del siniestro, los peritos aclararon que al no haberse encontrado vestigios concluyentes de fenómenos eléctricos (como marcas de arco eléctrico o cortocircuitos), no podía establecerse una certeza absoluta sobre el origen.
Esta línea de investigación recibió sustento adicional con el informe del ingeniero electricista electrónico designado como perito oficial. El profesional concluyó que, entre las posibles causas de origen eléctrico, la más probable era una falla en al menos uno de los plafones LED que formaban parte del sistema de iluminación general del piso, precisamente en el área identificada como sector de inicio del fuego.
Ante estos resultados, la Fiscalía informó que continúa adelante con diversas medidas probatorias tendientes a precisar las causas definitivas del siniestro. Entre estas diligencias se destacan nuevas pericias técnicas que podrían aportar datos adicionales sobre la dinámica del incendio.
Las autoridades judiciales aclararon que toda información relevante que no comprometa el desarrollo de la investigación será difundida a través de los canales oficiales de la Oficina de Prensa del Ministerio Público Fiscal, manteniendo así un principio de transparencia en el proceso investigativo.
El siniestro, que afortunadamente no dejó víctimas fatales, generó un importante impacto en la institución, que deberá realizar importantes trabajos de refacción en sus instalaciones. Además provocó suspicacias en la política local en medio de las causas que se investigan ligadas a Apross.