Las “madres del dolor” volvieron este martes a pedir justicia en las calles de la ciudad de Córdoba. A las 18, se concentraron en la esquina de las avenidas Colón y General Paz. Desde ese punto céntrico marcharon junto a medio centenar de personas por la memoria de los bebés que nacieron sanos y luego murieron o tuvieron complicaciones en el Hospital Materno Neonatal.
Mientras se espera con expectativa la declaración de la enfermera Brenda Agüero, la principal imputada en la causa que investiga el fiscal Raúl Garzón, una manifestación volvió a poner en el centro de la escena los graves episodios que acontecieron en ese centro de salud entre marzo y junio. En ese lapso, se investiga la muerte de al menos cinco bebés sanos y las complicaciones otros siete sobrevivientes.
Por momentos a los gritos y de a ratos con un silencio estremecedor, las referentes de este pedido se dirigieron hasta el centro comercial Patio Olmos. Allí realizaron breves declaraciones a la prensa y luego abandonaron el lugar. Durante toda la movilización, los transeúntes aplaudieron el caminar de las madres.
“Entendemos que esto lleva su tiempo, que hay una investigación de por medio y no vamos a decir mucho más al respecto. Pero tampoco nos vamos a quedar quietas. Estas marchas se van a seguir realizando”, adelantó Vanesa, una de las madres que perdió a su hijo tras un embarazo y un parto óptimos.
En la movilización estuvieron presentes la abuela Romina y las mamás Vanesa, Damaris y Yoselin. Todas unidas por una necesidad: encontrar respuestas sobre lo que ocurrió con sus bebés. Estuvieron acompañadas por familiares y por otras madres.
En nombre de los bebés
Habían pasado apenas unos minutos de las 18 y el corte de calles detuvo repentinamente el tráfico que a esa hora es constante en la ciudad. Las madres se ubicaron tras una bandera al estilo “barredora” que ocupó todo el ancho de la avenida General Paz. “Justicia por los bebés del Neonatal”, se podía leer.
Lo demás fue la repetición de las imágenes que comenzaron a verse en aquellos rostros de tristeza cuando, por la prensa, esas mamás supieron que había sospechas tras las muertes de sus recién nacidos.
Y el otro símbolo de unidad, tal vez el más fuerte, fue el grito de los nombres de cada bebé del Neonatal. “Justicia por Fran”, decían. Y la movilización respondía con una aclamación: “¡Justicia!”. Con paradas en cada esquina, el tránsito por la ancha avenida fue pausado. Cuando el silencio se apoderaba de la escena, otro grito revivía a todos: “Justicia por Ámbar”. Y la respuesta: " ¡Justicia!”.
“Esto no tiene que volver a pasar. Esto no puede volver a pasar. Somos mamás que nos hicimos todos los controles. Esto demuestra las deficiencias del sistema de salud”, remarcaron en un tramo de las declaraciones, al frente del Patio Olmos.
Además, volvieron a pedir que las investigaciones no se queden en una enfermera o en el personal del hospital. “El gobernador (Juan Schiaretti) se dio cuenta que el programa de protección a las embarazadas no es lo que ellos dicen”, alertaron las madres tras reconocer que el mandatario las había recibido.
“Hay tres imputados por incumplimiento de los deberes de funcionario público y una enfermera detenida. Sabemos que esto es una cadena de responsabilidades, empezando por los empleados, pero siguiendo por el señor (ex) ministro (de Salud, Diego Cardozo) que no denunció. Él tiene que pagar con su libertad”, dijeron encendidas.
Los gestos de dolor sólo cambiaron por momentos, mientras alguna se atrevía a gritar el nombre de su hijo y a pedir justicia. “Justicia por Cataleya. Justicia”, gritaban.
En tanto, dijeron que están convencidas de que se “hubieran podido evitar muchísimas muertes, mala praxis y violencia obstétrica” si las autoridades no ocultaban todo este drama.
Ahora esperan que los imputados declaren. Tras ello se abrirá el secreto de sumario. La pregunta que flota en el aire es si ese acto judicial va a aliviar el justificado malestar de estas madres que arrastran sus fuerzas hace días para pedir que les devuelvan un poco de tranquilidad.
