Los cambios bruscos de temperatura, el aire acondicionado y hasta el sol pueden debilitar el sistema inmune y abrirle la puerta a los molestos resfriados y cuadros gripales, incluso en pleno verano.
Los medios para combatirlos son variados y la alimentación, para reforzar el sistema inmunitario, es uno de ellos.
De hecho, estudios recientes evidencian la relación directa entre alimentación, nutrición y sistema inmunológico.
Gripe: el fruto seco que blinda el sistema inmune
En ese sentido, Nieves Palacios, especialista en endocrinología y nutrición, explica que en esta época del año es importante prestar especial atención a la alimentación, sobre todo las personas más delicadas (con problemas de salud) o con gran desgaste físico, como pueden ser los deportistas que entrenan de forma intensa.
Existen una serie de nutrientes que ayudan al buen funcionamiento del sistema inmune, como las proteínas y algunas vitaminas y minerales.
Entre ellos se encuentran los pistachos, un alimento rico en vitaminas A, E, C y vitaminas del grupo B, con minerales como el hierro, cinc, selenio, cobre y magnesio y fuente de proteína vegetal.
Los 10 nutrientes del pistacho que colaborar con el sistema inmunitario para combatir infecciones respiratorias
- Proteínas. A través del suministro de aminoácidos, resultan fundamentales para el mantenimiento del sistema inmune.
- Vitamina C. Potencia la inmunidad, incrementando un factor celular (interferón) que interfiere en la capacidad de muchos virus para infectar la severidad de la gripe y el resfriado.
- Vitamina A. Contribuye a mantener las mucosas contra las infecciones. Su déficit puede producir aumento en la susceptibilidad de padecer infecciones. 28 gramos de pistachos, la ración diaria recomendada aporta 2% de vitamina A.
- Vitamina E. Incrementa la respuesta inmunológica gracias a su poder antioxidante. 28 gramos de pistachos aportan el 2% de vitamina E.
- Vitaminas del grupo B. Contribuyen a optimizar el sistema inmune. Un puñado de pistachos (49 unidades) aporta 4,7 mg de riboflavina o Vitamina B12.
- Hierro. Es de gran importancia, ya que el déficit de este mineral (tan frecuente entre los deportistas), afecta a la respuesta del sistema inmune del organismo humano. 28 gramos de pistachos aportan 8,12 mg de hierro.
- Zinc. En dosis moderadas (28 gramos de pistacho aportan 0,6 mg), los estudios han demostrado que pueden reducir significativamente la duración de los síntomas del resfriado.
- Selenio. Ayuda al organismo a producir enzimas antioxidantes y protege a las células frente al daño oxidativo. 28 gramos o 49 pistachos aportan 5 microgramos de selenio.
- Cobre. 28 gramos de pistacho aportan 0,37 mg de cobre, mineral que actúa limitando la propagación de los virus y de las bacterias comunes.
- Magnesio. Finalmente, el magnesio contribuye al funcionamiento normal del sistema inmunitario frente a resfriados. 28 gramos de pistacho aportan 33,6 mg de magnesio.
El poder de los pistachos para un sistema inmune invencible
Los pistachos contienen ácidos grasos monoinsaturados y poliinsaturados, que tienen propiedades antiinflamatorias.
Una revisión publicada en Frontiers in Immunology destaca que una dieta rica en estas grasas puede moderar la inflamación crónica y mejorar la respuesta inmune.
La vitamina E, también abundante en los pistachos, podría tener un impacto positivo en la salud respiratoria. Un estudio de la American Journal of Clinical Nutrition sugiere que esta vitamina puede reducir la severidad de las infecciones respiratorias, como el resfriado común.
Cómo incorporarlos en tu dieta diaria
- Consumirlos como snack o agregarlos a ensaladas, yogures o platos principales.
- Una porción diaria de 30 gramos (unas 49 unidades) es suficiente para obtener sus nutrientes clave sin excederte en calorías.
Aunque los pistachos no son una cura milagrosa contra la gripe, su perfil nutricional los convierte en un aliado para mantener un sistema inmunitario fuerte. Como siempre, consultar con un profesional de la salud antes de realizar cambios significativos en la dieta.
