Nacieron en Jovita, una localidad ubicada en el sur de Córdoba, y desde temprana edad se inclinaron por el aprendizaje de la robótica. En la Escuela Municipal estudian, aprenden y se divierten chicos y chicas de distintas edades bajo la coordinación de la ingeniera en Sistemas, Carina Cosio.
Hace unos días, un grupo de chicos participó de una competencia regional que tuvo lugar en la ciudad de Salta. Ahí, Benicio Furman, Lautaro Toledo y Gaspar González, unidos en “Los Halcones”, conquistaron al jurado evaluador con su proyecto destinado a ser una solución robótica innovadora y funcional para el tambo bovino.
El lema de la competencia de este año es “aliados de la tierra”, según precisaron desde la Escuela Municipal de Robótica.
Luego de investigar durante semanas, el grupo “Los Halcones” decidió trabajar sobre el tambo, algo vinculado a la región productiva donde habitan.
“Ahí se desarrolló un Sistema Inteligente de Alimentación de Tambo Bovino (SIATAMBO)”, explicaron.
Con esa propuesta, los estudiantes obtuvieron el primer puesto entre decenas de chicos y chicas de todo el país y lograron el pase al mundial de robótica que tendrá lugar en noviembre en la ciudad metropolitana de Esmirna, en Turquía.
Sobre la competencia internacional de Robótica
La World Robot Olympiad (WRO) es una competencia internacional de robótica educativa que se lleva adelante desde hace 20 años y tiene como objetivo fomentar el interés y la pasión por la ciencia, la tecnología, la ingeniería y las matemáticas entre niños, niñas y jóvenes de todo el mundo.
La ciudad turca donde se hará el evento es un polo destacado en la industria y la tecnología.
Los estudiantes de Jovita no es la primera vez que de destacan en competencias de robótica en el país y el mundo.
En 2020 lograron resultados alentadores en Estados Unidos. Para las personas que trabajan en la escuela de robótica no existe una receta para lograr que los chicos y chicas destaquen. Pero sí hablan de tres premisas que se resumen en pasión, amor por lo que se hace y mucho estudio.
La escuela de robótica es pionera en el centro del país. Funciona en una vieja estación de servicio reciclada. Las últimas gestiones municipales han ponderado el proyecto y le dieron continuidad en esa ciudad.
