La actual crisis económica que impacta directamente sobre el poder adquisitivo de la población ya se advierte en los consumos más básicos y elementales. Por ejemplo, de pan y de criollitos.
Según el Centro de Industriales Panaderos de Córdoba (Cipac), en lo que va del año, las ventas de panificados acusan bajas que van del 10% al 50%, según el tipo de producto.
Así se lo aseguró a La Voz Marcelo Caula, titular de la entidad que nuclea a las panaderías de toda la provincia. “La situación de las panaderías en la provincia de Córdoba es muy preocupante. Hace desde marzo que no estamos actualizando los precios de nuestros productos al público, y así y todo las ventas siguen bajando”, aseguró.
Según Caula, las ventas de pan francés y mignon bajaron un 10% desde fines del año pasado; las de criollitos, el 30%, mientras que las de los productos más caros, como las facturas y las especialidades, muestran caídas que van del 40% al 50%.
“Nuestros costos siguen aumentando todos los meses, como los servicios, los alquileres, el combustible, los insumos, en general todos los costos fijos”, aseguró Caula.
“A pesar de esto, para nosotros es muy difícil trasladar esos aumentos a nuestros clientes por la recesión que hay. El riesgo es que las ventas bajen aún más”, entendió el dirigente.
Efectivamente, a fines de marzo pasado, el Cipac ajustó los precios de referencia para el sector, con un aumento del 10% para la mayoría de los productos panificados, con excepción de las facturas, que escalaron un 15%.
En ese momento, el precio del kilo de pan francés pasó a costar $ 2.900; el de pan mignon $ 3.200, y el kilo de criollos se fue a $ 6.400. En cuanto a las facturas, el precio se elevó a $ 700 por unidad.
En ese momento, se trató del segundo aumento en el precio de los productos panificados del año, ya que, a fines de enero, todos los valores se habían retocado un 15% a la suba, en promedio.
Según el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec), en julio –último dato disponible–, el precio del pan francés aumentó un 3%, para venderse en valores que oscilan entre los $ 2.100 y los $ 3.600, según las distintas regiones del país.
En la región pampeana, que incluye a Córdoba, el precio medio relevado fue de $ 2.860.
Impacto
La semana pasada, el Centro de Industriales Panaderos de la Provincia de Buenos Aires (Cipan) advirtió que, debido a la baja en las ventas, habían cerrado alrededor de 14 mil panaderías en todo el país.
Martín Pintos, presidente de la cámara industrial, dijo que la contracción de la demanda está obligando a las panaderías a trabajar al 50% de su capacidad.
“La gente empezó a hacerse su propio pan para ahorrar, porque usa esa plata para comprar leche o carne”, indicó Pintos.
En Córdoba, según registros del Cipac, la situación del sector no es tan límite, aunque reconocen que en los últimos meses habrían cerrado sus puertas y dejado de producir unas 40 panaderías en todo el ámbito de la provincia.