El clásico truco de la abuela para limpiar joyas con vinagre, sal, bicarbonato, detergente y papel de aluminio se sigue transmitiendo de generación en generación como una solución infalible para devolver el brillo a la plata.
Pero, aunque la mezcla pueda parecer eficaz a simple vista, su funcionamiento real dista mucho de lo que se cree. Así lo advierte el químico y divulgador Vladimir Sánchez, conocido en TikTok como @breakingvlad, que derribó este popular remedio casero.
El experto también explica qué ingredientes realmente hacen efecto y cuáles están de más.
La reacción que sí funciona y lo que sobra
Lo que realmente provoca la limpieza visible en el clásico truco de la abuela no es la combinación de todos esos ingredientes, sino una reacción química específica entre el aluminio y el sulfuro de plata que se forma en la superficie de las joyas.
Se trata de una reacción redox, es decir, de transferencia de electrones, que permite que la plata recupere su brillo original.
Para que esa reacción se produzca es necesario un electrolito disuelto en el agua, como puede ser el bicarbonato. Su presencia facilita el intercambio de electrones entre los metales, haciendo posible la limpieza sin frotar ni dañar la pieza, explica.
Ni el vinagre, ni la sal ni el detergente tienen un rol
Según detalla el químico, los demás ingredientes, especialmente populares en los remedios caseros, no cumplen ninguna función relevante en este proceso. “Ni el vinagre, ni la sal, ni el detergente tienen ningún rol específico en esta reacción”, afirma con rotundidad.
Añadirlos no sólo es innecesario, sino que puede generar confusión sobre cómo y por qué funciona realmente este método. Sánchez recomienda directamente ahorrárselos y gastarlos en algo que sea más útil.