Un estudio del grupo AGR-164 de la Universidad de Córdoba (UCO), en España, realizado junto al centro Ifapa Alameda del Obispo, concluye que la bellota posee propiedades nutricionales adecuadas para la alimentación humana. A pesar de ser un alimento poco utilizado, presenta un perfil rico en almidón, fibra, hierro y compuestos antioxidantes, según el análisis publicado en Future Foods.
La bellota es el fruto del roble, aunque su consumo es más conocido en el contexto de la producción de jamón de cerdo negro, similar al ibérico español.
Un fruto del bosque mediterráneo con potencial
El roble, al igual que la encina, son unos de los árboles más representativos del bosque mediterráneo y del sistema de dehesa. Su fruto, la bellota, se destina principalmente a la alimentación del cerdo ibérico.
El equipo investigador destaca que, aunque las bellotas tienen propiedades de interés, existe una gran variabilidad entre ejemplares debido a la falta de domesticación de la especie.
Las diferencias abarcan tamaño, sabor y grado de amargor, lo que complica su selección para consumo humano.
Qué encontraron los investigadores
El análisis se realizó sobre 14 individuos de encina y reveló varios puntos clave.
- Alto contenido en almidón.
- Perfil de ácidos grasos similar al del aceite de oliva.
- Ausencia de gluten.
- Aporte significativo de fibra y hierro.
El estudio también confirmó la presencia de compuestos fenólicos y metabolitos con actividad antioxidante, antiinflamatoria y antimicrobiana.
Dos grandes grupos de bellotas
Mediante técnicas como espectrofotometría NIRS, HPLC y LC-MS/MS, el equipo identificó dos grupos principales:
- Bellotas grandes y con bajo grado de amargor.
- Bellotas de tamaño medio y mayor amargor.
Los perfiles metabolómicos resultaron altamente específicos de cada árbol. Además, se detectaron metabolitos de origen microbiano asociados al microbioma de la semilla, que podrían influir en el grado de amargor.
Hacia un catálogo de encinas aptas para consumo humano
La investigación forma parte de la tesis doctoral de Marta Tienda Parrilla y abre la puerta a nuevas líneas de trabajo. Una posibilidad es evaluar la actividad biológica de los compuestos presentes en la bellota y definir su impacto en la salud.
Otra línea apunta a crear un catálogo de encinas con características destacables para programas de domesticación. El objetivo sería seleccionar individuos con un perfil genético favorable que permitan producir bellotas aptas para la alimentación humana sin reducir la variabilidad de la especie.
