En Argentina, la empleabilidad de las personas LGBT+ presenta desafíos significativos, a pesar de los avances en políticas de inclusión. Si bien existen leyes y programas para promover su inserción laboral, especialmente para personas trans y travestis, persisten altos índices de discriminación, desempleo y dificultades en el acceso a trabajos formales.
Es en este contexto que la asociación civil “El Telar”, con el objetivo de fortalecer la articulación entre el sector privado, el Estado y las organizaciones LGBT+, lleva adelante dos proyectos con el objetivo de que haya un mayor compromiso con la problemática y acciones transformadoras.
El primero de ellos se denomina “Empleo Sin Armarios” (ESA), y es financiado por el Programa de Fortalecimiento a Organizaciones de la Diversidad Sexogenérica de la Secretaría de Derechos Humanos y Diversidad del Ministerio de Desarrollo Humano de la Provincia.
Durante una jornada de capacitación llevada a cabo en abril pasado se compartieron herramientas clave para construir espacios de trabajo inclusivos y con más oportunidades para todas las personas, sin importar su identidad o expresión de género.
Dicha formación involucró a más de 40 empresas, de la que habrá una nueva edición en los próximos meses. “Fue una oportunidad de reconstruir el diálogo de esta mesa tripartita que en el último tiempo se había perdido”, sostuvo el trabajador social y doctorando en estudios de género, Pascual Scarpino.
“La incorporación en el mundo del trabajo es una de las demandas históricas del colectivo LGBT+ a la que buscamos dar respuesta con diferentes acciones desde el Gobierno provincial. La complejidad de esta problemática se ve atravesada por distintas dimensiones como la trayectoria de las personas que son parte del colectivo, las necesidades del sector privado, el contexto económico, entre otras”, indicó la secretaria de Derechos Humanos y Diversidad , Tamara Pez.
Desde “El Telar” indicaron que la participación fue heterogénea porque incluyó a referentes de recursos humanos de empresas (algunas multinacionales) junto a responsables de Pymes locales.
Un proceso lento
Con el objetivo de intentar definir un estado de situación, Scarpino reconoció tres consideraciones o representaciones sociales que podrían explicar por qué la empleabilidad de las personas LGBT+ aún es muy lenta en nuestro país:
Una de ellas es suponer que “es un problema”. En primer lugar eso supondría que no existe previamente. El problema radica cuando desde una empresa no se ejerce una política inclusiva.
Otra “es que es un capricho o una moda”. Los datos del Relevamiento Anual 2023 indican que la tasa de desocupación de este colectivo duplica a la reportada por el Indec para el mismo período de tiempo.
Finalmente que “es un gasto”. Estudios indican que políticas de empleabilidad con enfoque en diversidad, equidad e inclusión (DEI) reditúa en beneficios para las empresas y sus integrantes.
De allí que se vuelve necesario promover espacios de diálogo y alianzas para que cada vez más personas LGBT+ accedan a un empleo formal y por tanto se promueva una sociedad más justa y equitativa.
Estrategia DEI
“Aún persisten prácticas discriminatorias, sesgos comunicacionales e invisibilizaciones para toda aquella persona que no se ajusta al sistema cisnormativo”, advirtió Scarpino.
El objetivo de estas formaciones a empresas pretende en primer lugar que haya un reconocimiento a la diversidad entre sus empleados y por tanto se ajusten los procesos necesarios para generar y promover un ambiente inclusivo.
En realidad es un enfoque integral para crear un ambiente de trabajo justo y acogedor para todos los empleados. Implica la implementación de políticas y prácticas que promuevan la representación de diversas perspectivas, garanticen la igualdad de oportunidades y fomenten un sentido de pertenencia para cada individuo.
“Una estrategia DEI que trasciende decisiones de dirección y se realiza atendiendo a las particularidades de la organización, contribuye con la apropiación de la cultura organizacional por parte de todas las personas colaboradoras”, expresaron desde “El Telar”.
Y sumaron: “Para el afuera, presenta a la organización como un actor atento de su contexto, con interés por la construcción de un proyecto empresario implicado socialmente”.
El compromiso de los actores involucrados con acciones concretas que contribuyan a la inserción y sostenimiento laboral, y la caracterización de perfiles laborales LGBT+ para agilizar de manera sinérgica la empleabilidad, son dos de las contribuciones que persigue “El Telar”.
“Del trabajo intersectorial surge la necesidad de capacitación, determinar el protagonismo que deben asumir las organizaciones en las respuestas que se construyen, la base de datos con perfiles, el acompañamiento en los procesos de selección e inducción, entre otros aspectos”, explicó Pez.
Apoyo a Pymes de Capital
La experiencia con la primera edición de ESA, le mostró al equipo de la asociación civil la necesidad de ofrecer mayor apoyo a las Pymes locales para perseguir estos objetivos. Así surgió el Programa Piloto de Diversidad, Equidad e Inclusión para empresas de la ciudad de Córdoba.
Son tres capacitaciones gratuitas virtuales certificadas que cuentan con el apoyo del programa Ciudad Activa de la Secretaría de Políticas Sociales y Desarrollo Humano de la Municipalidad de Córdoba. Las inscripciones están abiertas hasta el próximo 29 de agosto.