La Unidad de Auditoría Interna (UAI) de la Universidad Nacional de Córdoba (UNC) finalizó su evaluación y emitió un dictamen desfavorable a la gestión de la exdecana de la Facultad de Ciencias de la Comunicación (FCC) Mariela Lucrecia Parisi. En el informe se plasmarían una serie de irregularidades en compras, rendiciones de gastos y contrataciones.
Entre esas objeciones, figura la contratación de su esposo, el periodista César Barraco Mármol, para dictar un ciclo de extensión titulado “No te peines que es radio”, sin contar con la “existencia de título habilitante conforme lo dispone la legislación universitaria”, según dice el informe 06/2025, dirigido al rector Jhon Boretto.
De igual modo, se marcan irregularidades en rendición de gastos, compras reñidas con la normativa y viajes no autorizados por el Consejo Superior de la Universidad.
La investigación se produce luego de publicaciones del medio digital Striptease del Poder y de la denuncia presentada ante el fiscal federal Enrique Senestrari por el egresado y apoderado de la lista opositora en la FCC Lucas Gonzalo Valdés.
El fiscal no se ha pronunciado, si bien circularon en las últimas horas versiones de que podría tomar una determinación (como la promoción de acción o imputación) a partir del informe de la UAI. La Voz intentó contactar a Senestrari, pero no hubo respuesta.
Valdés está representado por los abogados José D’Antona y Camila Cornú, y en su denuncia expuso ante la Justicia federal “un presunto esquema de aprovechamiento de la función pública para beneficio personal y de terceros cercanos a la decana”.
Señalan que esas maniobras “se habrían centrado en el manejo discrecional de fondos públicos, la adjudicación irregular de cargos y contratos y el uso de su influencia”, tanto en la facultad como en los Servicios de Radio y Televisión (SRT) de la UNC, donde Parisi integraba el directorio.
Al igual que las publicaciones periodísticas, la presentación se basa en gran medida en resoluciones publicadas en el digesto digital de la UNC. El pasado 8 de agosto, Valdés y sus abogados ampliaron la denuncia y señalan que el informe de la UAI “confirmó las anomalías denunciadas”.

Añadieron que el doble rol de Parisi de decana y miembro del directorio de los SRT le sirvió “para favorecer a su familia”. Indicaron: “Mientras se producían más de 100 despidos en los SRT, el programa de radio de su esposo, César Barraco Mármol, fue expandido”. Además, aseguran, la decana “contrató a su propia hija como pasante rentada para trabajar en dicho programa”.
La denuncia detalla un manejo discrecional de fondos públicos, incluyendo “el reintegro de cientos de gastos personales, como compras en supermercados, cenas y combustible, muchos realizados durante fines de semana” y con facturas “a consumidor final”. La auditoría de la UNC confirmó que “en determinados gastos no se cumplimentaron las disposiciones legales vigentes”, señaló D’Antona a La Voz.
Además de la contratación “irregular” de Barraco Mármol, mencionan la “compra directa de pasajes y equipos tecnológicos a un docente amigo (de la facultad) por montos millonarios, sin la debida licitación”.
Asimismo, denunciaron “costosos viajes al exterior y nacionales” en los que Parisi habría “cobrado viáticos por más días que la duración de los eventos y sin las autorizaciones correspondientes”.
Finalmente, se la acusa de “abuso de autoridad” por “auto-titularizarse” horas cátedra de manera irregular, para cumplir los requisitos para ser elegida decana y por la presunta manipulación de concursos docentes para favorecer a aliados políticos. Los hechos denunciados podrían configurar los delitos de “peculado”, “defraudación contra la administración pública”, “negociaciones incompatibles con la función pública” y “abuso de autoridad”, dicen los denunciantes.
D’Antona y Cornú sostienen que “la Fiscalía Federal se encuentra evaluando y analizando de manera detallada la prueba aportada” por la querella, que a su vez pidió “procesar a Parisi conforme lo establece el Código Procesal Penal de la Nación, en virtud de existir sobrada prueba de los hechos que han sido denunciados”.
Observaciones y descargos
Parisi fue consultada por este medio y respondió una a una las nueve observaciones del informe de la UAI emitido en junio pasado, señalando que las “observaciones” y “recomendaciones” de ese dictamen “son de forma” y “no de fondo” y mucho menos significan malversación de recursos.
A modo de respuesta, envió la nota que su exvicedecana Fabiana Martínez remitió en mayo pasado a la UAI (antes del informe), en la cual comenta las medidas que se tomarán en adelante para salvar las observaciones. Además, en algunos párrafos explican los porqués de las fallas observadas.
A continuación, se indican la “observación” y la “respuesta” de la FCC:
El punto 1 del informe dice: “Se verificó la existencia de comprobantes de gastos en la dependencia emitidos a nombre de ‘consumidor final’ y no a nombre de la UNC”. La nota de la facultad habla de lo que se hará en adelante para evitar la irregularidad observada y añade entre otras explicaciones que “por cuestiones de tiempo y urgencia, fue necesario adelantar los mismos (gastos) con fondos personales”. También dice que “los plazos requeridos para efectuar la compra a través del circuito formal del área de compras de la FCC no permitían dar respuesta inmediata a la necesidad surgida”, por lo que “excepcionalmente” se recurrió a “la adquisición directa”.
La observación 2 dice que “se verificó en determinadas compras de combustible, tickets consecutivos” el mismo día, en la misma estación, con diferencia de minutos o segundos, ”todos por un importe inferior al establecido" para eludir el Impuesto sobre los Ingresos Brutos. Sobre esto, la nota de la exvicedecana indica cómo se manejarán en adelante con esa rendición.
En el punto 3, la auditoría reprocha que hubo compras de “viajes” e “insumos informáticos”, ambos a un docente de la facultad. A grandes rasgos, la nota de la FCC sostiene que ese docente intervino en “contrataciones menores, proveyendo presupuesto y que, en definitiva, fue la oferta más conveniente”.
La cuarta observación se refiere a la contratación de Barraco Mármol sin título de grado. Uno de los tramos de la justificación señala que por “tratarse de un curso de extensión, abierto a la comunidad, no es requisito indispensable contar con título habilitante”.
El punto 5 dice: “No se pudo verificar en los gastos de movilidad vinculados a tickets de taxis, la existencia de una planilla donde se consigne usuario, motivo del trámite, origen y destino del viaje”. El descargo señala que “sí se instrumentan, a través de una planilla, los gastos de movilidad por tickets de taxis o remises para todos los dependientes de la FCC, excepto para la decana que solicita reintegros”. Aclara que en ese formulario predeterminado se consigna usuario, motivo del trámite, origen y destino del viaje.
La sexta observación de la UAI detecta “determinadas resoluciones decanales en las cuales no se detalla el importe de los gastos convalidados en las mismas y/o no se adjuntan comprobantes de dichos gastos, como así también en el cuerpo de las mismas no se indica la normativa aplicable al acto administrativo”.
El punto 7 se refiere a “todas” las resoluciones decanales que autorizan la carga de combustible o estacionamiento: “No se consigna número de patente del vehículo afectado a trámites oficiales”. La nota de la vicedecana Martínez expresa cómo se manejarán en adelante y algunas justificaciones.
El punto 8 tiene que ver con viajes al extranjero: el que hizo Parisi a Ecuador en 2017, aprobado a posteriori, y el de una docente a Uruguay (2023), que no cuenta con autorización rectoral. En el primer caso, adujeron “demora administrativa en la tramitación” y en el segundo admitieron que no remitieron el expediente.