Las campañas de prevención y control del humo del cigarrillo están dando sus frutos. Después de años de luchas por disminuir la exposición al tabaco, las estadísticas demuestran que las legislaciones y los cambios no se hicieron en vano.
Un estudio realizado en Córdoba, sobre la base de la estadística del Registro Provincial de Tumores, detectó que –en varones– descendió la incidencia de cáncer de pulmón.
En 2006, se registraban 3,1 casos por cada 100 mil habitantes en Córdoba. La cifra descendió a 0,6 caso en 2022. La disminución fue del 80%.
Un comportamiento similar se registró en los tumores de vejiga, en hombres de todas las edades. En 2006, la incidencia era de 1,3 cada 100 mil habitantes. Mientras que, en 2022, el indicador bajó a 0,4.
La tendencia de estos dos tumores en varones se comportó de una manera diferente, en comparación con el resto de los casos de cáncer. En general, esta enfermedad se detecta cada vez más en personas menores de 50 años. Y crece la incidencia de tumores malignos, en especial, de mama, colon y recto.
La investigación fue realizada por la Asociación de Oncólogos Clínicos de Córdoba y el Registro Provincial de Tumores. Los datos del estudio fueron publicados por La Voz en su edición del 26 de mayo.
El trabajo calculó las variaciones en la incidencia de cáncer de aparición temprana, diagnosticadas en menores de 50 años. Tomó tres fechas de corte: 2006, 2014 y 2022, según el tipo de tumor.
Entre los más frecuentes
Claudia Alejandra Martin, oncóloga clínica y vicepresidenta de la Asociación, atribuyó esta situación a las campañas de control del humo del cigarrillo y a la detección precoz de lesiones que pueden convertirse potencialmente en un tumor maligno.
“El avance en las tecnologías de diagnóstico permite detectar nódulos en tomografías de tórax. Cuando se hacen biopsias en algunas de esas lesiones, se encuentran algunas características malignas que no llegan a ser tumores. Si no se controlan, pueden llegar a avanzar”, explicó.
Durante la pandemia, aumentó la detección de nódulos aislados, ya que también se realizaron más tomografías en pacientes con Covid-19.
Martin agregó que “las campañas antitabaco evidentemente han funcionado”.
“En el estudio detectamos un descenso paulatino del cáncer de pulmón y de vejiga, con una baja más abrupta en los últimos 15 años, que coincide con las campañas de prevención”, indicó. Otro dato significativo es que los casos que más bajaron corresponden al cáncer de pulmón, en células pequeñas. Estas se encuentran más relacionadas con el tabaquismo.
El riesgo acumulado que tiene un fumador de tener cáncer de pulmón y de vejiga coincide con el período en estudio.
Sin embargo, en las mujeres no se registró el mismo comportamiento. Esto puede deberse a que el hábito de fumar comenzó antes en los varones.
“No nos tenemos que relajar. La prevención debe continuar todo el año”, sostuvo la especialista. Otros hábitos saludables, como la alimentación y el deporte, se deben sostener en el tiempo.
Edad promedio
El cáncer de pulmón sigue estando dentro de los más comunes. En hombres, es el tercero más frecuente, debajo del de próstata y de colon. En mujeres, es el cuarto, después del de mama, colon y cuello uterino.
La edad promedio al momento del diagnóstico se ubica en los 65 años.
El estudio relaciona el descenso con los diagnósticos oportunos y las campañas antitabaco.
Martin informó que en algunos países se está implementando un método de detección de cáncer de pulmón con “tomografías de baja dosis”, que tienen una menor irradiación que estos métodos de diagnóstico, cuando son comunes.
Los estudios se sugieren en fumadores que tengan más de 50 años, para poder detectar nódulos pequeños.
Esta propuesta aún no ha demostrado mejorar la sobrevida a nivel mundial. Sin embargo, puede ser tenida en cuenta para monitorear la salud pulmonar de los tabaquistas. La estrategia además permitiría captar a esta población para que puedan ingresar en un programa preventivo, indicó la especialista.
Intervención urbana
Un grupo de asociaciones de la sociedad civil, jóvenes y activistas realizarán una intervención de arte urbano para sensibilizar sobre los riesgos del consumo del tabaco y la nicotina, en el formato del “vapeo”.
La actividad se realizará en el día mundial Sin Tabaco, el próximo sábado 31 de mayo, desde las 10, en el Parque de Las Tejas.
“El vapeador es una estrategia de la industria tabacalera para captar consumidores cada vez más jóvenes”, sostuvieron las organizaciones en un comunicado de prensa.
Esta acción forma parte de la campaña “Menos Humo, Más Data”, impulsada por Fundeps, Crea y Proyecto Squatters.
Las organizaciones promueven la actualización de las leyes nacionales, para que se incluya el vapeo dentro de las campañas de control y de prevención del humo del cigarrillo.
