Durante 2024, la ciudad de Córdoba registró un promedio de seis muertes mensuales por siniestros viales. Esta cifra se reveló en la presentación del Reporte de Mortalidad Vial 2024, elaborado por la Municipalidad en conjunto con Vital Strategies y la Iniciativa Bloomberg Philanthropies para la Seguridad Vial Global.
El análisis identificó que el 79% de los fallecidos correspondió al grupo más vulnerable en la vía pública: peatones, ciclistas y motociclistas. En este último grupo, el informe reveló un dato preocupante: la participación de motociclistas en los fallecimientos aumentó un 10% respecto a 2023. A este incremento se le sumó un agravante clave: el exceso de velocidad, que surgió como uno de los factores más determinantes en la letalidad de los siniestros.
Exceso de velocidad y falta de protección: combinación letal
Un estudio observacional complementario, realizado por la Universidad Johns Hopkins en Córdoba y Buenos Aires, detectó que el 62% de los motociclistas cordobeses supera los límites de velocidad establecidos. Esta proporción superó el 55% registrado en Buenos Aires.
El informe técnico, coordinado junto al Conicet, reportó además que se había observado un crecimiento sostenido tanto en las velocidades mínimas como máximas en las dos rondas de observación realizadas en la Capital cordobesa.
La falta de respeto por los límites de velocidad se combinó con el escaso uso de elementos de protección personal. En Córdoba, apenas el 59% de los conductores de motocicletas utilizó casco, una cifra considerablemente inferior al 86% relevado en Buenos Aires.
Entre los acompañantes, la diferencia fue aún más marcada: solo el 42% llevaba casco en Córdoba, frente al 83% porteño. Esta baja adopción de medidas de seguridad incidió directamente en la gravedad de los traumatismos y en las tasas de mortalidad, especialmente en colisiones a alta velocidad.
El Reporte de Mortalidad Vial 2024 también identificó que el 52% de las muertes ocurrió en horario nocturno. Esta franja horaria, asociada a menor visibilidad y controles más laxos, coincidió con las condiciones en las que suelen darse los excesos de velocidad más pronunciados.
Además, el 51% de las personas fallecidas tenía entre 10 y 29 años, lo que refleja una vulnerabilidad particular entre los jóvenes. En ese grupo etario, las muertes de motociclistas crecieron un 30% respecto al año anterior.
En cuanto a la distribución por género y franja horaria, el análisis reveló que el 58% de las mujeres fallecieron entre la medianoche y el mediodía, mientras que el 54% de los hombres murieron entre el mediodía y la medianoche. A partir de los 50 años, la proporción de mujeres fallecidas superó a la de los hombres: un 34% frente al 25%, respectivamente.
Jóvenes en riesgo y un desafío para las políticas públicas
La magnitud de la problemática quedó reflejada en las cifras acumuladas: entre 2021 y 2024 murieron 311 personas por siniestros viales en la ciudad de Córdoba. Esto representó un promedio anual de 78 fallecimientos, es decir, una muerte cada cinco días.
La tasa de mortalidad en ese período se ubicó en cinco personas fallecidas cada 100 mil habitantes, según datos del Observatorio de Seguridad y Convivencia del Consejo de Planificación Estratégica de la Provincia.
El informe de Johns Hopkins complementó los datos locales con una perspectiva más cualitativa. En las encuestas realizadas, el 84% de los participantes indicó que conducía motocicletas todos los días o casi todos los días, en su mayoría vehículos de baja cilindrada.
Aunque la mayoría no había estado involucrada en siniestros recientes, el 9% reportó colisiones sin daños ni lesiones, y el 7% informó haber sufrido incidentes con consecuencias físicas o materiales.
Frente a este escenario, desde el municipio señalaron que se había intensificado el trabajo en múltiples frentes: rediseño de espacios urbanos, fortalecimiento de sistemas de información, aumento de los controles de tránsito y campañas de concientización. La estrategia se enmarca en una política sostenida para reducir las muertes y lesiones graves.
