“Es impostergable la adopción de un modelo que se funde en la economía circular, basándose en reducir, reutilizar y reciclar”. La frase expresa el principio que guía el nuevo plan de Gestión Integral de Residuos de la Provincia y parece marcar el inicio de un cambio de época en la gestión con la “llaryorización” del léxico.
El plan prevé la utilización de un fondo con más de 1.500 millones de pesos para la “cicatrización” de basurales a cielo abierto, la creación de centros ambientales y de transferencia en las 24 regiones en las que se dividirá la gestión de residuos en la provincia y la conformación e impulso del clúster del reciclado, para mejorar las condiciones de vida de los recuperadores urbanos.
Fondos para basurales y economía circular en Córdoba
En economía circular, los primeros pasos se darán con los programas de acciones sustentables para industrias y establecimientos agropecuarios. Y casi de inmediato se avanzará en el lanzamiento del “Mercado de materiales”, una iniciativa similar a la de las subastas que realiza el ente Córdoba Obras y Servicios (Coys) de la Municipalidad de Córdoba y que busca generar mejores condiciones para la valorización de los materiales recuperados y, a la vez, ofrecer garantías de cantidad y calidad en la provisión a la demanda industrial de materia prima reciclada.
“El Gobierno provincial invertirá en logística, infraestructura y educación de manera de compatibilizar el crecimiento económico y social con el desarrollo sostenible. El paradigma económico que promueve el desarrollo sostenible se denomina economía circular, en el cual el ciclo de vida de los productos es estudiado atentamente para conseguir introducirlos en un ciclo cerrado de materiales, minimizando la cantidad de residuos producidos”, explican desde Ambiente.
El programa enfatiza la relevancia de la educación, pero no detalla qué acciones educativas se promoverán. “Los esfuerzo técnicos en materia de infraestructura y equipamiento no solo deben acompañarse en fuertes campañas de educación sino que deben fundarse en ellas”, postula el plan.
Se prevé, también, la creación de “islas ecológicas” en los parques industriales, la implementación de “corredores” para residuos específicos y la trazabilidad de los residuos peligrosos.
La regionalización está a medias: actualmente, 10 de las 24 tienen planta de tratamiento y disposición final y hay otras 10 que están proyectadas y cuatro más que serán financiadas con créditos del Banco Interamericano de Desarrollo (BID). Esta es otra de las prioridades del plan: que todas las regiones empiecen a trabajar en la eliminación de los basurales a cielo abierto y con criterios de gestión sostenible.
Así se distribuiría el fondo de 1.500 millones de pesos
- 966 millones para la ampliación de los módulos de disposición final, la construcción de centros ambientales de transferencia y el reacondicionamiento de la infraestructura.
- 450 millones para equipamiento y fortalecimiento de logística
- 84 millones de pesos para la “cicatrización” de basurales en las zonas en operación (hoy, 10 regiones).
Críticas desde la oposición
El legislador radical Dante Rossi salió al cruce del anuncio al que atribuyó intención proselistista. “Después de 24 años se dan cuenta qué hay basurales a cielo abierto. Como hay campaña anuncian un plan que es puro marketing. Presentamos un pedido de informes para saber que han hecho hasta la fecha. Un ejemplo: basural de Villa de María de Río Seco”, tuiteó.
