La vegetación que rodea a las Sierras de Córdoba y la tranquilidad que transmiten las convierten en el destino ideal para hacer una escapada de un día, de un fin de semana o para ir a vacacionar.
La mayoría de nosotros planificamos nuestros viajes pensando en el destino, en el punto final (o de inicio) del lugar al que queremos llegar. Sin embargo, viajar en tren nos abre las puertas a pensar en el trayecto, a conocer lugares que desde la ruta son inaccesibles.
La cuestión del tiempo cobra menos importancia cuando hablamos de un viaje recreativo. Y sí, el tren va más lento que los demás medios de transporte, pero nos invita a mirar a nuestro alrededor con otros ojos, a contagiarnos de la tranquilidad que transmiten los paisajes desde cada ventana.
Al subirnos, emprendemos un viaje por el medio de la montaña con vistas que son cada vez mejores a medida que nos acercamos a Punilla.
Además de la experiencia única, hay otro punto a favor de este medio de transporte, con el que ni el auto ni el colectivo pueden competir: el precio.
En tren, podemos viajar hacia distintas localidades de Córdoba por menos de $ 70. Este es uno de los puntos que más destacan sus pasajeros y una de las razones por las que lo eligen.
El recorrido
Desde la primera parada, el Tren de las Sierras demora aproximadamente tres horas y media en llegar hasta la última estación. En su recorrido pasa por ríos, puentes, túneles y ciudades pintorescas de Córdoba. Además, tiene una hermosa vista al lago San Roque y a su nuevo puente, José Manuel de la Sota.
Si bien en la mayoría de las paradas el transporte sólo frena el tiempo que demoran los pasajeros en subir y bajar, en algunas otras se detiene un rato más.
Una de ellas es La Calera, un destino conocido como el “portal de las sierras chicas”, donde se puede descansar y tomar aire fresco, además de una primera parada para acceder al baño.
Más adelante, en la parada de Casa Bamba, hay un puesto con una gran variedad de comida para comprar y disfrutar en el paseo. Entre otras opciones, ofrece torta, tortillas, pastelitos, tortas fritas y alimentos regionales.
Por el momento, el recorrido termina en Valle Hermoso, aunque se espera que en septiembre el tren extienda su trayecto y llegue a Capilla del Monte, lugar al que retornará después de cuatro décadas. El primero de julio se hizo una prueba piloto luego del arreglo de las vías en esa zona de Punilla.
Estos son todos los lugares en donde el tren tiene una parada: Córdoba (estación Mitre), Alta Córdoba, Hospital Neonatal, Rodríguez del Busto, La Tablada, Argüello, Tristán Narvaja, Dumesnil, La Calera, Casa Bamba, Cassaffousth, San Roque, Bialet Massé, Santa María, Cosquín, Casa Grande y Valle Hermoso.
Cuáles son los horarios del Tren de las Sierras
El tren está en funcionamiento todos los días, pero sus recorridos varían según el día y el horario.
Desde la ciudad de Córdoba, algunos se ponen en marcha desde la estación Mitre (frente a la Terminal de Ómnibus) y otros desde Alta Córdoba. En sentido contrario, algunos tienen su primera parada en Valle Hermoso y otros en La Calera.
“Los días viernes, sábado, domingo y lunes hay seis frecuencias: tres que salen de Valle Hermoso y tres que salen de Córdoba. Los días martes, miércoles y jueves hay cuatro frecuencias, dos que salen de Valle Hermoso y dos que salen de Córdoba”, explicó el guardatren Leandro Martínez Rossi.
Tren de las Sierras: cuánto sale y cómo comprar un pasaje
Los precios, actualizados y vigentes desde el primer día de julio, van desde los $ 23 hasta los $ 66, dependiendo de cuál es el recorrido que uno elige.
Hay tres formas de comprar el pasaje. Una de ellas es online, a través de la página de Trenes Argentinos. De forma física se puede comprar en algunas de las estaciones o con el guardatren, una vez que el tren llega a la estación.
Distintas opiniones de los pasajeros
Según La Voz pudo averiguar, la mayoría de las personas que toman el tren para ir a las localidades más alejadas de la ciudad de Córdoba lo hacen de modo recreativo.
En las estaciones de la ciudad es donde suele haber más movimiento, porque ahí sí hay más personas que lo usan diariamente.
Una de las pasajeras, Marina Pen, sostuvo que este medio de transporte es “sólo recreativo” y que de otra forma no resulta “útil para la sociedad”. Además, remarcó que le gustaría “usar el tren para ir al centro de la ciudad de Córdoba, como hay en tantas ciudades”.
En la misma línea, otra mujer llamada Karina Schmidt aseveró: “Debería haber muchas más paradas y mayores frecuencias para poderlo disfrutar de otra manera, y poderlo usar para ir del trabajo a la casa y de la casa al trabajo”.
Por su parte, Horacio Irisarri resaltó que el tren es “un poco más lento”, pero que se puede tomar si uno no tiene apuro. “Si tengo que viajar a Córdoba, a lo mejor en vez de ir en cole me voy en tren. Es más lindo el paisaje y es más económico”, detalló.
Unos asientos separaban a Horacio de Mónica Farías, una mujer del partido de La Matanza, Buenos Aires, que estaba vacacionando en Córdoba. Ella remarcó que, como no tenía “tiempo ni horarios”, podía disfrutar del tren y sus paisajes.
Además, aseguró que estaba “muy conforme” con el personal y con el tren, pero que deberían mejorar las vías porque “estuvieron inactivas por mucho tiempo”. Sin embargo, afirmó: “A lo que se cotiza el tiempo y el valor es muy ecónimico, entonces no me puedo quejar”.
Por último, otro pasajero llamado Ricado Vega, remarcó: “Pasear en tren es una delicia porque, como va despacio, podés ir observando toda la naturaleza de las Sierras”.
