Familias de Córdoba capital y del interior provincial denunciaron ante la Justicia a la empresa constructora Conoc Habitar, registrada bajo denominación Khaliq Anwar SRL, por incumplimientos en los contratos por compras de lotes o planes de viviendas.
La desarrollista se dedica a la venta de planes de ahorro para la adquisición de viviendas y hace unas semanas se declaró en quiebra. Y aseguró que nunca incumplió los compromisos asumidos.
Los adjudicatarios aseguran lo contrario y afirmaron a La Voz que aún no se sabe el total de los damnificados. Hay casos en Capital, Jesús María, Monte Cristo, Carlos Paz, San Agustín, Colonia Tirolesa y otras ciudades.
Algunos hicieron denuncias particulares y otros en grupo, tanto en el fuero civil como en lo penal. Al menos 42 familias de Córdoba, e incluso de otras provincias, son representadas por el abogado Carlos Nayi.
El letrado dijo que el centro de operaciones giraba en torno a la empresa que preside Ezequiel Ocaña y otras personas señaladas en la denuncia.
“En este caso, no son simples incumplimientos de contratos, sino que hubo mala fe. Captaron distintas sumas de dinero asumiendo compromisos en terrenos donde no estaban habilitados, lo que, a criterio de los damnificados, son estafas”, afirmó el abogado.
A la vez, señaló que siguen operando sin asumir los compromisos que se sabe que no van a cumplir.
La causa penal, ahora bajo secreto de sumario, está a cargo de la fiscal Daniela Maluf, de la Fiscalía de Instrucción Subrogante que investiga desde el año pasado.
Al respecto, la fiscal confirmó a La Voz que las denuncias son por presuntas estafas reiteradas, pero afirmó que aún no hay imputaciones por el caso, mientras la investigación está abierta.
“Se está evaluando la documentación que se secuestró tras los allanamientos a la constructora”, expresó la fiscal.
Algunos casos
Uno de los presuntos damnificados es Ariel Pérez, quien contrató a Nayi para accionar contra Conoc. Peréz contó a La Voz que en 2013 ingresó a un plan de vivienda en Colonia Tirolesa. “Venía adelantando cuotas y el 10 de abril de 2024 firmé un contrato de rescisión para ese loteo y compré en un loteo de Villa Catalina, en Río Ceballos”, relató.
Luego de hacer la operación, se enteró de que Conoc tenía un pedido de quiebra. Fue a la empresa, pero no obtuvo respuestas. “Me sentí estafado porque sabían que estaban en proceso de quiebra cuando puse el dinero”, afirmó.
Cómo Pérez, al menos otros 50 adjudicatarios se autoconvocaron y armaron un grupo de WhatsApp para reclamar que se les devolviera el dinero invertido o entregaran las viviendas comprometidas. Algunos llevan más de 10 años en conflicto con la empresa y denuncian maltratos por reclamar lo que consideran suyo.
Hay personas que invirtieron viviendas, autos, terrenos, departamentos y dólares. Algunos accionaron ante la Justicia para que la empresa les devolviera lo invertido.
Gisela, una de las adjudicatarias, entregó su casa familiar como forma de pago de un plan de viviendas. Conoc se comprometió a entregar la nueva vivienda a los 36 meses, “pero hasta hoy esa promesa no se cumplió”, narró la mujer.
“Quedamos en la calle. Se comprometieron a pagar los alquileres y desde octubre del año pasado no lo hacen. Hice la demanda penal y nos ofrecen algo que después es una mentira”, dijo.
Otro es el caso de Erika, quien cansada de esperar tomó posesión sobre uno de los terrenos en Tierra Colonial II, en Colonia Tirolesa. “Tengo el 96% de los aportes. Tampoco tengo aval de que ese lugar sea mi casa. Y recibí amenazas porque me instalé en el lugar”, afirmó.
Ahora, los damnificados piden que se haga Justicia “para evitar que sigan estafando a más personas”, indicaron.
En Jesús María
En Jesús María, Conoc comercializó un loteo de cinco hectáreas que no fue aprobado y tampoco construyeron ni una sola vivienda. Hay al menos 200 causas en la Justicia Civil y quieren conectar todos los reclamos.
Un grupo de adherentes a la empresa se reunieron en el loteo inconcluso que la firma tiene en la ciudad. Algunos de ellos llegaron a pagar U$S 60 mil y nunca recibieron ni un ladrillo.
Es el caso de Karina, quien en 2017 entregó esa suma y la constructora se comprometía a culminarla a los 18 meses. Si se cumplía ese plazo, ellos se harían cargo del pago del alquiler.
Todos los meses renegaba con el pago del alquiler y desde hace tres meses no le pagan más. “Me dijeron que en Jesús María ellos directamente no iban a entregar las casas”, expresó la mujer.
Luego de audiencias de conciliación con la empresa y sus abogados, en las que ofrecieron darle lotes en distintos puntos de la provincia, no llegaron a un acuerdo porque ninguno tenía los papeles en regla. Es por eso que decidió iniciar una demanda judicial.
El abogado Nicolás Clapier, quien representa a otros damnificados de Conoc, estuvo intentando que las causas se agruparan, dado que muchos vecinos de Jesús María, que hasta el mes pasado aportaron sus cuotas, no tienen perspectivas de que les entregaran las viviendas que están pagando.
Explicó que la declaración de quiebra le impide a la constructora seguir funcionando y se designó un síndico, que será quien tendrá que velar por los intereses de todos los aportantes que se sientan afectados.
De hecho, Conoc ya perdió varios juicios en los que se los obligó a pagar indemnización a familias. Una de las últimas sentencias se dictó el pasado 26 de marzo, en el Juzgado Civil y Comercial 1, donde se dispuso el pago de $ 5.085.715 a la persona damnificada, quien prefirió mantener su nombre en reserva.
Clapier sostuvo que la empresa montó una “superestructura de ventas” con presencia en los medios más importantes de la provincia y de esta manera captaba clientes que apostaban por el sueño de la casa propia.
Quiebra y pedido
La constructora se declaró en quiebra en el Juzgado Civil y Comercial de 13° Nominación de Córdoba y comunicó a sus clientes mediante un comunicado. La misma fue publicada en el Boletín Oficial de la Provincia de Córdoba con fecha 17 de abril de 2024
El abogado de la firma, Alberto Misino, dijo a La Voz que la empresa no está imputada y que tampoco fue citada a declarar.
“Conoc está en quiebra declarada y presentaremos un pedido para transformarla en un concurso preventivo”, aseguró.
La medida de conversión incluiría a todos los acreedores —expresó el letrado— concurrentes para reactivar las operaciones de la empresa.
“No soy un estafador”
Ezequiel Ocaña, dueño de Conoc, se defendió y dijo a La Voz que no era un estafador. “Pueden venir a auditarme, son 1.224 lotes, no tengo ninguno a mi nombre (...). No me hice millonario a costa de empobrecer a los clientes”, manifestó.
Además, remarcó que la situación actual le genera muchísima tristeza. “La empresa no es una caja recaudadora, sino que es mi motivo de vida porque la armé”, subrayó.
Ocaña aseguró que, a pesar de los errores que puede cometer como empresario o por las dificultades propias de la empresa, el contexto económico tampoco lo ayudó.
“El 50% de mis clientes perdieron la capacidad de pago. Y no salí a hablar mal de nadie, ni de las 40 familias que tengo viviendo en casas que no me pueden pagar y nunca los desalojé”, argumentó.
Además, agregó que hay personas que estuvieron 10 años para llegar a tener la llave, y hay otras que no pueden llegar porque se puso “muy cuesta arriba”, y terminaron quedándose con un lote.
“Nos hizo un hueco muy grande al comprar en Zárate Construcciones para tres años. No entregó nada y subsistimos durante esos seis años para cumplir con nuestros clientes”, aseguró.
Y aclaró: “Tampoco tengo una empresa piramidal. Y estoy haciendo lo que me dice la Justicia para poder volver a tomar el timón, con el control de un síndico”.
Con la colaboración de Nicolás Luque (Jesús María)
