La movilidad en la zona noroeste de la ciudad de Córdoba está cada vez más complicada. La cantidad de vehículos privados crece sin parar, ralentizando la circulación en una zona donde los espacios para transitar son pocos.
Tomando esa problemática, las arquitectas Eliana Porta y Magalí Sartori plantearon la construcción de una estación intermodal de transporte en barrio Argüello, como trabajo de tesis en la carrera de Arquitectura de la Universidad Blas Pascal.
El trabajo fue dirigido por los docentes Jorge Taberna, Carolina Alberto, Miguel Vercellone, Fernando Scalzadona, Anabella Cardellino, Martín Firpo y Juan Quargnenti.
La estructura se erige en el predio que hoy ocupa la estación Argüello del Tren Metropolitano, delimitado por las avenidas Ricardo Rojas y Donato Álvarez.
La intervención es llamativa: tiene un edificio que se caracteriza por un ligero techo de curvas parabólicas que reúne una serie de actividades relacionadas con el transporte, “generando de esta manera una estación intermodal en un punto estratégico de la ciudad”, dice la memoria descriptiva del proyecto.
La estación cuenta con espacio para bicicletas, mejora el acceso al servicio de ómnibus urbanos y al tren, y tiene características sustentables: paneles solares en los techos, sistemas de reutilización de aguas grises, climatización sostenible, gestión de residuos con separación, iluminación natural y utiliza materiales reciclables.
Todo, envuelto en un techo de tela: “La cubierta textil liviana establece una relación con su contexto y con la exposición de la luz que aporta, creando un espacio abierto y luminoso, difuminando el límite entre el interior y el exterior”.
Las arquitectas explican que se optó por una estructura tensada ligera y eficaz “que puede abarcar grandes superficies, situando los apoyos de manera modulada para optimizar las actividades que se desarrollan por debajo de la gran cubierta”.
En el edificio se colocan dos grandes núcleos fijos que contienen el sector húmedo y las escaleras de emergencias, así como también los ascensores, permitiendo un punto de partida para el desarrollo de las demás actividades de manera flexible.
Por debajo de la gran cubierta el proyecto abarca la sustentabilidad desde el tipo “edificio infraestructura”, donde genera parte de la energía que necesita.
“Dentro de este se comprende una estación ferroviaria, comercios, espacios culturales, recreativos y administrativos que se interrelacionan de manera constante a través de escaleras mecánicas y losas en voladizo, adoptando como referencia la tipología de un shopping para organizar y vincular las actividades”, sintetizan las jóvenes profesionales.
