Estudiantes del colegio Luterano Concordia, de la ciudad de Córdoba, idearon un dispositivo no invasivo para medir la glucosa en sangre y así mejorar la calidad de vida de las personas que padecen diabetes.
Se trata de GlucoSense, un “glucómetro” que funciona con luz infrarroja, desarrollado por los actuales egresados Agustín Brito Hess, Matías Campos, Francisco Lo Cascio, Trinidad Orellano y María Victoria Sarach.
Los chicos, bajo la coordinación del profesor Fabricio Bridera, de la materia Metodología de la Investigación, pensaron, en 2024, una solución no invasiva y accesible para controlar la enfermedad, algo que habitualmente se hace con “pinchazos”.
Para lograrlo, primero realizaron una investigación bibliográfica sobre la tecnología de espectroscopia y luego llevaron a cabo testeos para comparar las mediciones del dispositivo con el actual medidor. También se enfocaron en tesis internacionales.
“Son chicos muy autosuficientes, es decir, no hacía falta motivarlos o pedirles que cumplieran con determinadas tareas. Eso da tranquilidad, pero, a la vez, exige estar atentos y aportar ideas”, indicó el profesor a La Voz.
Y subrayó el gran desafío de los estudiantes para lograr lo que propusieron. “Cada uno valoró lo importancia del desarrollo pensado en las personas porque viven muy de cerca los efectos de la enfermedad”, subrayó Bridera.
Con el proyecto listo, se presentaron al Hackatón ArcelorMittal, una competencia nacional para crear ideas, prototipos y soluciones a problemas reales, realizada en Rosario, Santa Fe. GlucoSense ganó el primer premio entre 120 colegios de todo el país.
Además, los jóvenes fueron distinguidos con beneplácitos de la Legislatura y del Concejo Deliberante de Córdoba.
La invención podría beneficiar a las personas que padecen esta enfermedad al evitar la intervención con pinchazos, tanto por los bajos costos y como por el fácil traslado del dispositivo.
Alta incidencia
La diabetes es una enfermedad crónica que se caracteriza por presentar niveles altos de azúcar en sangre. Acompaña toda la vida a la persona que la padece y, con un seguimiento y un tratamiento adecuados, se pueden prevenir complicaciones y llevar una vida normal.
Se estima que uno de cada 10 argentinos de 18 años o más tiene diabetes, y dado que, por varios años, permanece sin síntomas, aproximadamente cuatro de cada 10 personas que la padecen desconocen su condición.
Cómo empezó
“Identificamos la problemática que es común al grupo, porque casi todos tenemos un familiar que padece diabetes y vemos cómo lidian con los pinchazos diarios”, contó Francisco sobre los comienzos del proyecto.
A partir de allí, los chicos comenzaron a indagar sobre un método no invasivo, que fuera portátil y económico.
Ya que “el medidor actual tiene 50 tiras reactivas, y una persona necesita medirse la glucosa al menos cinco veces al día, tiene que comprar dos paquetes por mes y eso cuesta más de $ 70 mil (los precios dependen de las marcas)”, indicó el joven.
Además, son muy pocas las obras sociales que brindan cobertura total.
Comparado con los dispositivos usados actualmente, GlucoSense tiene un costo que ronda los $ 30 mil y la inversión sería por única vez.
Si bien el proyecto fue creado con la idea de que fuera sin fines de lucro, los inventores proyectan convertirlo en una startup; entonces, el costo podría variar.
Cómo funciona
El dispositivo, que cuenta con batería, funciona mediante tecnología de luz infrarroja, lo que evita la incisión en la piel y el ingreso de material externo al organismo.
Además contribuye a la reducción de residuos plásticos generados en cada medición, lo que contribuye al cuidado ambiental.
“El desafío era poder procesar las señales de la espectroscopia infrarroja, con dos sensores: uno la emite y el otro la capta”, contó Francisco.
Para medir la glucemia, se coloca el dedo en medio de los medidores y, según la luz emitida, se indicará la cantidad de luz absorbida por las moléculas de glucosa. Y se obtiene el número que establece el nivel de glucosa en sangre.
Los resultados fueron comparados con los valores del medidor actual (Accu Chek) y determinaron la factibilidad del uso del dispositivo creado por los chicos.
Proyección
Los jóvenes armaron el prototipo, pero ahora buscan asesoramiento legal para registrarlo como producto médico.
“En Argentina, este un proceso muy largo. Se necesita hacer testeos en laboratorio y requerimos de ayuda de profesionales especializados”, dijo María Victoria Sarach.
Además, necesitan mentorías para seguir desarrollándolo y generar relaciones con las universidades para que llegue a las personas que lo necesitan.
Por ahora, los chicos son asesorados por el Anden, el Centro de Innovación y Emprendimientos Tecnológicos de la Universidad Tecnológica Nacional (UTN).
“Son muchas las personas a las que les puede interesar nuestro proyecto, además de potenciales inversores. La diabetes es una enfermedad que atraviesa a muchos y podemos ayudarlos”, dijo Sarach.
Los chicos, que ya no se ven en clases porque los cinco estudian carreras universitarias, siguen juntos con la finalidad de que el proyecto se convierta en una realidad y alivie a las personas diabéticas con un mejor método.
Cómo colaborar. Para colaborar con el proyecto GlucoSeme, lo pueden hacer por Instagram: glucosense.ok o al alias: glucosense. El titular de cuenta es Agustín Brito Hess.