La exploración del Cañón Submarino de Mar del Plata, llevada a cabo por científicos del Conicet en colaboración con el Schmidt Ocean Institute, se ha transformado en un verdadero fenómeno viral en redes sociales y plataformas de streaming.
Miles de espectadores se conectan a diario para ser testigos de los sorprendentes hallazgos en las profundidades del Atlántico Sur. Descubre cómo sumergirte en este mundo poco explorado desde la comodidad de tu hogar.
Dónde ver la expedición en tiempo real
Las transmisiones en vivo de esta innovadora expedición, titulada “Underwater Oases of Mar Del Plata Canyon: Talud Continental IV”, se pueden seguir principalmente a través del canal oficial de YouTube del Schmidt Ocean Institute. Para asegurarte de no perderte ninguna inmersión, el equipo científico recomienda:
- Suscribirse al canal de YouTube del Schmidt Ocean Institute y activar la campana de notificaciones.
- Unirse al canal oficial de WhatsApp del proyecto para recibir avisos inmediatos.
- Seguir el perfil de Instagram @gempa.ar, que proporciona actualizaciones minuto a minuto, fotos y cambios en el cronograma.
Las transmisiones, que comenzaron el 23 de julio y se extenderán hasta el 10 de agosto, han superado el millón de visualizaciones, alcanzando picos de más de 50.000 espectadores simultáneos en YouTube.
Un salto tecnológico y científico sin precedentes
Esta misión marca un hito en la investigación marina argentina, siendo la primera vez que se utiliza en aguas del Atlántico Sudoccidental el vehículo operado remotamente (ROV) SuBastian. Este robot submarino, propiedad del Schmidt Ocean Institute, permite capturar imágenes en ultra alta definición y recolectar muestras sin alterar el entorno natural. La travesía se realiza a bordo del buque de investigación Falkor (too), equipado con tecnología oceanográfica de última generación.

Explorando el “Otro Planeta” submarino
El área de estudio es el cañón submarino de Mar del Plata, ubicado a unos 300 kilómetros de la costa bonaerense y a profundidades que alcanzan los 3.900 metros. Esta región es una frontera biogeográfica clave en el Atlántico Sur, donde confluyen las corrientes cálida de Brasil y fría de Malvinas, creando un ecosistema de alta biodiversidad.
Los objetivos principales de la expedición son ambiciosos:
- Estudiar hábitats vulnerables.
- Analizar la biodiversidad de la fauna, incluyendo invertebrados y peces en el abismo.
- Recolectar muestras de ADN ambiental.
- Evaluar el impacto de la basura marina en el fondo del océano y detectar otros impactos humanos, como microplásticos.
- Estudiar la distribución de especies y su relación con variables ambientales, topográficas y oceanográficas.
Los científicos han descrito la experiencia como “explorar otro planeta, pero debajo del agua”, encontrando organismos y paisajes submarinos que parecen sacados de otro mundo.
Hallazgos como la estrella de mar “culona” (Hippasteria) y el pepino de mar violeta “Batatita” se han vuelto virales, conectando a la gente con la belleza marina de una manera única y generando empatía y la necesidad de protección.
La expedición cuenta con un equipo multidisciplinario de más de 30 científicos de diversas instituciones argentinas, en su mayoría del Conicet, así como investigadores de universidades nacionales. La posibilidad de transmitir en vivo ha hecho que la ciencia sea más cercana y emocionante para todos, obligando a los investigadores a explicar sus descubrimientos de forma clara y accesible.
Aunque el sistema científico nacional enfrenta recortes presupuestarios, esta iniciativa demuestra la importancia y el alcance de la investigación en Argentina. Todos los datos recolectados durante la expedición se publicarán en repositorios abiertos como Conicet Digital, OBIS y GenBank, y se espera generar material educativo para escuelas, museos y clubes de ciencia.
Esta campaña da continuidad a expediciones previas como Talud Continental I, II y III, que ya habían revelado una diversidad inesperada y permitido describir decenas de nuevas especies.