Una polémica se desató en los últimos días en la provincia de Chubut luego de que un buque pesquero capturara de forma “no intencional” a un tiburón durante un operativo de pesca de merluza, reabrió el debate sobre la pesca y los protocolos de conservación de las especies.
La foto, difundida en Facebook por Marinero Puerto Madryn, generó debates sobre la pesca, y si el animal estaba vivo o no al momento de ser devuelto al mar.
Para arrojar luz sobre el suceso, Nelson Bovcon, reconocido investigador y docente del Instituto de Hidrobiología de la Universidad Nacional de la Patagonia, explicó a medios locales que este tipo de captura corresponde a lo que se conoce como “pesca incidental”.
Bovcon aclaró que es una realidad que “muchas veces otras especies que acompañan a la merluza son capturadas de forma no intencional”.
Además, el experto sostuvo que la tripulación del barco pesquero actuó acorde a los protocolos establecidos, intentando devolver el animal al mar una vez detectada su presencia a bordo.
El incierto destino del tiburón y el debate por la conservación
A pesar de los esfuerzos de la tripulación por seguir las directrices, el destino final del tiburón es incierto. Bovcon consideró que, dadas las características de lo ocurrido y el tamaño del animal, “es probable que el tiburón haya regresado sin vida al agua”.
Este evento no solo generó controversia en el ámbito digital, sino que también reabrió el diálogo fundamental sobre la pesca responsable y la urgencia de fortalecer los protocolos de conservación de las especies marinas en la región.
La discusión se centra ahora en cómo mitigar el impacto de la actividad pesquera en la biodiversidad, incluso en casos de captura accidental.