El paro que afectó por varias horas este jueves al transporte urbano de Córdoba dejó frentes abiertos y un terreno fértil para las especulaciones. La primera es la inminencia de un nuevo pago que deben recibir los choferes: este viernes tienen que recibir en sus cuentas bancarias el “adelanto”, que es el 45% de su salario. Por otro lado, en el municipio apuntan contra UTA y su interna como la causa de la medida de fuerza.
Este jueves, el sindicato de choferes realizó una medida de fuerza que interrumpió los servicios en las líneas que le pertenecieron a Ersa hasta fin de febrero, y que ahora funcionan bajo la órbita de la municipal Tamse. Se trata de los corredores 2, 4, 7 y las líneas 50 y 51. Desde la conducción del gremio se señaló que no se había depositado un ítem no remunerativo acordado en la última paritaria.
El paro se levantó recién a las 10, y el servicio se normalizó cerca del mediodía.
La respuesta a la protesta corrió por cuenta de Eduardo Ramírez, el presidente de Tamse, que criticó con dureza la decisión y sostuvo que está motivada en la interna del sindicato.
Desde el gremio, en tanto, desestimaron las acusaciones y advirtieron que este viernes es una fecha clave: deben percibir el “adelanto”, que es del 45% del salario y que se cobra todos los días 22 de cada mes.
Acerca del pago que se debe realizar este viernes, el presidente de Tamse aseguró que los fondos están y que los trabajadores van a cobrar. Según comentaron desde el gremio, el dinero debe estar depositado antes de las 17. Y si eso no sucede, podría producirse una nueva medida de fuerza.
