El agua alcalina se popularizó en los últimos años como una supuesta aliada para mejorar la salud, desde neutralizar la acidez del cuerpo hasta aportar más energía.
Sin embargo, detrás de esta tendencia hay tanto defensores entusiastas como especialistas que piden cautela. ¿Qué dice realmente la ciencia sobre sus beneficios? ¿Puede ser peligrosa si se consume en exceso?
El agua alcalina, ¿es peligrosa o tiene beneficios para la salud?
El agua alcalina es un tipo de agua sometida a un proceso de ionización que separa las fracciones alcalina y ácida y tiene un pH mayor de siete.
En concreto, el pH, determinado por los minerales que se encuentran en suspensión en el agua, es la medida de acidez de un medio. Se considera siete el punto de equilibrio; por debajo de ese nivel se considera un medio ácido y, por encima de siete, un medio básico o alcalino.
El agua natural del planeta se encuentra en niveles de acidez entre 6,5 y 9 unidades. Niveles más bajos o más altos suelen ser tóxicos.
En ese contexto, muchos plantean que este tipo de agua tiene un efecto desintoxicante y puede ayudar en determinadas patologías, como el cáncer.
Al respecto, Juan José López Gómez, especialista en endocrinología y nutrición, confirma que no existe ninguna evidencia que plantee que estos tipos de agua puedan conseguir ningún beneficio en la salud.
De hecho, agrega, hasta puede ocasionar perjuicios. Es cierto que “si el grado de alcalinización es bajo no tiene por qué ocasionar ningún problema”, reconoce el doctor López, pero “aguas excesivamente alcalinas pueden producir daños a nivel estomacal o a nivel de medio interno si se introduce de manera crónica un exceso de determinados minerales”, alerta el experto.
Aguas mineromedicinales
El hecho es que sí hay determinados tipos de aguas que pueden utilizarse para tratar algunas dolencias, pero sus beneficios no están relacionados con la alcalinidad, sino con la presencia de minerales en la misma.
“Determinados tipos de aguas mineromedicinales o de mineralización débil con un distinto contenido en minerales puede tener una distinta acidez y, ocasionalmente, se utilizan en determinadas dolencias, sobre todo el algunas dolencias urológicas relacionadas con cálculos renales”, detalla el experto.
Pero López Gómez insiste en que estos tipos de agua se suelen utilizar por el tipo de minerales contenidos, no por la alcalinidad de las mismas. De hecho, en la mayor parte de los casos, la acidez del agua se neutraliza en su tránsito a través del tubo digestivo y los cambios de acidez en los distintos compartimentos, ya sea boca, estómago o intestino.
Calidad del agua según el Código Alimentario Argentino
El Código Alimentario Argentino en su Capítulo XII, Artículos: 982 al 1079 - Bebidas Hídricas, Agua y Agua Gasificadas establece:
“Con las denominaciones de Agua potable de suministro público y Agua potable de uso domiciliario, se entiende la que es apta para la alimentación y uso doméstico: no deberá contener substancias o cuerpos extraños de origen biológico, orgánico, inorgánico o radiactivo en tenores tales que la hagan peligrosa para la salud. Deberá presentar sabor agradable y ser prácticamente incolora, inodora, límpida y transparente. El agua potable de uso domiciliario es el agua proveniente de un suministro público, de un pozo o de otra fuente, ubicada en los reservorios o depósitos domiciliarios”.
El agua alcalina aún no recibió la aprobación de la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (Anmat), el organismo oficial responsable de controlar y fiscalizar la calidad y seguridad de medicamentos y alimentos, entre otros.