Romina Salas, violinista cordobesa de 36 años, fue hallada muerta el 12 de junio de 2025, nueve meses después de denunciar a su exmarido por violencia de género. La muerte es investigada como posible suicidio.
El proceso judicial que continúa tras la muerte de Romina se había iniciado dos años antes, en 2023, con su divorcio y división patrimonial con Patricio Franciulli. Durante meses, Salas denunció numerosas situaciones de violencia.
En agosto de 2024, fue más allá y realizó la denuncia penal por hostigamiento psicológico, patrimonial, digital, privación de la libertad y abuso sexual. La causa continúa abierta y el fallecimiento de Romina, caratulado como “muerte de etiología dudosa”, se suma a la investigación.
Graciela Taranto, abogada de la víctima, aseguró a La Voz: “El daño estaba siendo muy grande para ella, insostenible, por todo este debilitamiento posterior a los hechos de violencia sufridos”.
La abogada subrayó que “todo eso se le atribuye a Patricio Franciulli, el mismo denunciado”.
En diálogo con El Doce, Mirta, la madre de Romina expresó: “No merecía quitarse la vida para que haya justicia. Esto se podría haber evitado, pero nadie hizo nada”.
Violencia económica: la denuncia
Luego de la separación definitiva, Franciulli “dejó en la calle” a su exesposa, según enfatizó la abogada, quien remarcó que ella ni siquiera pudo llevarse su viola, el instrumento con el que trabajaba y podía dar clases.
En esa misma instancia, el hombre cambió las cerraduras de la tienda de instrumentos musicales que compartían, limitando aún más la posibilidad de Romina de acceder a un ingreso.
Además, la violencia económica “perduró hasta el día del fallecimiento de Romina”. En este sentido, Taranto destacó el rol del padre del denunciado desde que este salió del país para mudarse a Eslovaquia, donde reside.
“Según lo que sabemos, fue él el que vació el departamento compartido, se llevó el auto, y cambió la titularidad de la cuenta con un poder que Romina nunca firmó”, comentó.
Indicó que para Romina volver a verlo supuso “no una causa, pero sí un detonante”. “Tenía mucho miedo”, recordó.

El presente de la investigación por la muerte de Romina Salas
“Había tres expedientes: uno que investigaba la muerte, otro que investigaba el abuso sexual y la privación de libertad y un tercer expediente de violencia económica”, explicó Taranto.
La abogada solicitó la unificación de las tres investigaciones. “Está totalmente relacionado y es la misma prueba para todo”, aseguró.
Con la denuncia realizada en 2024, se solicitó una autopsia psicológica de la víctima y del imputado. Sin embargo, la Fiscalía nunca estableció fecha para realizarla y Franciulli salió del país.
Sin embargo, de cara a la muerte de Romina, el procedimiento ha tomado otro ritmo. “Han aceptado el pedido de autopsia psicológica y se está dirigiendo prueba testimonial y de distintos tipos”, refirió la abogada.
Actualmente, la investigación por la denuncia de violencia del 2024 se lleva a cabo por la fiscal Natalia Aguirre, de la Fiscalía 3 de Violencia Familiar.
Por su parte, la Fiscalía del distrito 3 turno 3 investiga la muerte de Romina Salas y la Fiscalía del distrito 4 turno 4 se encarga del expediente por violencia económica.

Indagarán al acusado
El próximo viernes 27 se realizará la primera declaración indagatoria del imputado, nueve meses después del inicio de la causa.
Taranto destacó la importancia de esa instancia, ya que previamente no se había tomado declaración a Franciulli. Resaltó que esto “permite a las partes acceder al expediente”.
“Nosotros hemos ofrecido un montón de prueba documental, testimonial, de todo, y todavía no podemos verlo hasta que declare el imputado”, aseguró la abogada.
Además, se expresó sobre la Justicia: “Nos han dado respuestas; esperemos que siga así y que por lo menos la familia pueda obtener la justicia que Romi no”.
