Según el último reporte del Observatorio de la Cadena Láctea Argentina (Ocla), se neesitan lluvias “importantes” para el último cuatrimestre del año, cuando se produce el 38% del total de la producción nacional.
Es que, según la entidad, para revertir la caída en la producción se precisa con urgencia una ayuda del clima.
Los números de la producción lechera argentina
En agosto del 2024 la producción fue de 992,8 millones de litros de leche, esto implica un valor 5,5% por encima del mes anterior (igual en el promedio diario) y un 6,2% menos que igual mes del año anterior.
“Normalmente la producción en el mes de agosto sube cerca del 6,5% respecto a julio (en promedio diario), este agosto ha tenido un valor un poco por debajo, subiendo un 5,5%”, sostiene Ocla.
Si se analiza por tamaño de tambos, por niveles de productividad/eficiencia y por región geográfica, se evidencia una gran diferencia respecto al comportamiento de la producción, donde hay importantes caídas interanuales en regiones y estratos productivos y otras con porcentajes muy inferiores.
Caída en la producción de leche
La caída de producción se fue profundizando durante la primera parte del año, acumulando un 14,5% menos de producción para el primer cuatrimestre del año, respecto a igual período de 2023.
En la mayoría de las zonas los datos vienen mejorando significativamente y se da una recuperación entre mayo y agosto de las fuertes caídas de los meses anteriores.
Se espera que se sigan recuperando los niveles productivos y pasar a valores positivos interanuales y el acumulado anual esté entre 4 y 6% por debajo, año contra año.
Recordando que, en el último cuatrimestre del año, se produce alrededor del 38% de la producción total del año y siendo un factor decisivo para lograr la recuperación que se presenten lluvias importantes en los próximos meses.
Los denominados “sólidos útiles” (grasa butirosa y proteína) cayeron el 10,7% en el período enero-agosto de 2024 (promedio diario), prácticamente igual que la caída de la producción en litros de leche (-10,9%), lo cual indica un cuasi sostenimiento de los tenores de grasa butirosa y proteína (denominados sólidos útiles: 7,20% en 2023 y 7,22% en 2024).
Como es habitual, la producción desde el pico de máxima en octubre, cae a una tasa del 5% mensual hasta marzo/abril (tomando el promedio diario de producción, para que no afecten la cantidad de días de cada mes), donde luego comienza un nuevo repunte hacia octubre.
