En el mercado FOB, el trigo argentino está cotizando a U$S 215 la tonelada, de acuerdo a lo informado por la Bolsa de Cereales de Buenos Aires, mientras que el trigo americano en el FOB Golfo está cotizando a U$S 234 para el trigo blando y a U$S 237 para el trigo duro. No es normal que exista muy poca diferencia entre el trigo duro y el trigo blando en Estados Unidos; usualmente, el trigo duro está mucho más caro que el trigo blando.
Problemas de calidad en el trigo duro achicaron la diferencia entre ambos trigos. En teoría, el trigo argentino compite con el trigo duro americano, y en este caso vemos que nuestro trigo está cotizando a un descuento de U$S 22 por tonelada, más barato que el trigo de origen americano.
En el análisis local, se observa que el precio FAS de paridad teórica de exportación, de acuerdo a lo informado por la Bolsa de Comercio de Rosario, arroja un precio FAS de U$S 187 la tonelada a partir de un FOB de U$S 219. Si lo comparamos con el mercado de futuros A3, se observa que el trigo disponible cotiza a U$S 185,5, valor muy similar a la paridad teórica de compra.
El trigo, con precios en alza
Lo interesante para destacar es la tendencia alcista que muestra el trigo en el mercado de futuros, con la posición noviembre llegando al mínimo de U$S 184, y, a partir de ahí, comienza una tendencia a la suba.
Las posiciones futuras muestran el trigo diciembre a U$S 185; la posición enero, a U$S 188; marzo, a U$S 192, y julio, a U$S 198. El mercado indica que el precio más bajo del trigo se registrará en cosecha y, cuando esta finalice, el mercado consolidará cada vez mejores precios futuros.
Este deja un mensaje para los productores: no vendan el trigo en cosecha y esperen, que a partir de enero los precios van a ir mejorando en las posiciones futuras.
Cabe analizar ahora la posición de los exportadores; para la cosecha de trigo viejo 2024/2025, las compras acumuladas entre compras a precio y fijaciones llegan a 12,6 millones de toneladas, mientras que las ventas declaradas (DJVE) llegan a 12,2 millones de toneladas.
La posición neta de los exportadores arroja entonces un volumen de sobrecompra de 378 mil toneladas. Este volumen es posible que ingrese como existencia final o “carry-over” para ser embarcado como trigo de la nueva cosecha. También es posible que esta posición sea el principal motivo de los bajos precios del trigo en estos momentos.
Analizando la posición de los exportadores de la nueva cosecha 2025/2026, vemos que el volumen de compras a precio y fijaciones llega a 1,88 millones de toneladas, mientras que las ventas declaradas llegan a 2,01 millones de toneladas. De esta forma, los exportadores tienen una posición “short” (corta) de 130 mil toneladas, que, como decíamos en párrafos anteriores, puede ser cubierta con las existencias finales del trigo de la cosecha anterior.
Las proyecciones del maíz
En el caso del maíz cosecha actual 2024/2025, vemos que los exportadores acumulan compras y fijaciones por un volumen total de 22,08 millones de toneladas, mientras que las ventas declaradas, las DJVE, llegan a 24,63 millones de toneladas. La posición neta arroja un volumen por cubrir, o “short”, de 2,55 millones de toneladas.
Sin embargo, hay un dato que no es menor: queda pendiente de fijar un volumen de 3,9 millones de toneladas. Conforme avance el tiempo y se produzcan las fijaciones, esta situación le puede ir quitando presión de compra por parte de los exportadores.
Este puede ser entonces el principal factor alcista para el mercado de maíz; de hecho, las posiciones disponibles a diciembre se mantienen en el rango de U$S 181 y de U$S 182.
Precisamente, es a partir de abril de 2026, con el ingreso de la nueva cosecha, cuando se produce una caída a U$S 172,5. Por eso, el productor tendrá que estar atento para capturar los buenos precios del maíz antes que se produzca la baja.
(*) Analista de mercado