A los precios de mercado en todos los commodities, trigo, soja y maíz, tanto en el disponible como los precios futuros nueva cosecha, los márgenes de exportación son negativos. Esto quiere decir que los exportadores pierden plata si analizamos los precios FOB de mercado y los precios FAS teóricos resultantes. No se contempla en este análisis algún hipotético beneficio financiero que alguna empresa en forma individual pudiera tener.
Veamos lo que sucede con el precio FOB de maíz para embarque abril/mayo: en estos momentos, está cotizando a U$S 199 la tonelada (U$S/tn), equivalente a un precio FAS teórico de 165 U$S/tn, mientras que el precio del mercado en el MATBA-Rofex está cotizando a 182 U$S/tn.
La diferencia de 17 U$S/tn es el precio que debería bajar el mercado para que la exportación tenga un margen cero, ni perdida ni ganancia. Resumiendo, el precio de ventana para el maíz nueva cosecha debería ser de 165 U$S/tn, en lugar de la cotización actual de 182 U$S/tn.
La pregunta del millón es ¿cuál será el precio del maíz nuevo cuando comience la cosecha en abril o mayo? Si uno se guía por el precio FAS teórico, el precio del maíz debería ser 165 U$S/tn, pero es muy difícil poder predecir en forma tan anticipada (faltan siete meses) a cuánto estará el mercado en la realidad.
Mientras tanto, los productores han comenzado a vender maíz forward nueva cosecha, posición mayo 2025, con un volumen registrado de ventas de 220 mil toneladas en la segunda semana de octubre.
Por lo pronto, estamos viendo que Chicago muestra tendencia muy volátil y errática. Entre agosto y principios de octubre, el maíz en Chicago posición mayo subió 17 U$S/tn, entre principios y finales de octubre el mercado perdió 10 U$S/tn.
En el balance, la ganancia neta en el mercado fue de solamente 7 U$S/tn. Hay que destacar que estas variaciones que sufrió el mercado de Chicago no se trasladaron en forma lineal y automática a las cotizaciones del maíz sobre el mercado en Argentina. Este divorcio entre los dos mercados es consecuencia de la incertidumbre que existe con respecto al volumen de la cosecha de maíz en Brasil y en Argentina.
Por su parte, la cosecha de maíz en Estados Unidos está a punto de concluir, y se espera que a partir de noviembre los precios sobre Chicago comiencen a consolidar una tendencia sostenida a firme.
Harina de soja
En el caso de la soja, los márgenes de molienda, resultante a partir de la elaboración del poroto de soja y la consecuente producción de aceite y harina de soja, son negativos en 25 U$S/tn.
El precio de paridad para que la industria aceitera tenga margen de molienda “cero”, es decir, que no gane ni pierda plata, es de 264 U$S/tn, mientras que los precios en el MATBA-Rofex están cotizando a 289 U$S/tn.
En concreto, este resultado negativo del margen de molienda actúa como uno de los principales factores bajistas a la hora del ingreso de la nueva cosecha.
Sucede que con una siembra de soja en el orden de los 18 a 19 millones de hectáreas, podremos aspirar a tener una cosecha de soja en el rango de 52 a 55 millones de toneladas.
Con este volumen de producción, más el ingreso de la soja de la cosecha anterior 2024, conocido como “carry-over”, estimado en 12 millones de toneladas, llegamos a un volumen de oferta global de 64 a 67 millones de toneladas.
Este es el dato clave para el mercado, con semejante volumen de producción de soja de la nueva cosecha más el stock final de la cosecha 2024, no resiste que la industria aceitera acepte arrancar la nueva cosecha con márgenes de molienda negativos.
Dicho de otra forma, las chances de baja en el precio de la soja nueva de 25 U$S/tn es altamente probable.
