La evolución del estado de los cultivos de soja y de maíz en los Estados Unidos es seguida muy de cerca por los operadores de granos y demás actores del comercio mundial. La fuente es el habitual informe semanal el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (Usda).
En el caso del maíz, el 67% de los cultivos se encuentran en estado excelente (15%) y bueno (52%), mientras que a igual fecha del año anterior solamente el 51% de los cultivos estaban en condición excelente (8%) y bueno (43%). En el mismo informe se confirma que el 11% de los cultivos están atravesando la etapa de formación de espiga y prepolinización, contra el 4% a igual fecha de la campaña anterior.
Estos dos parámetros son los que están influyendo en la baja de los precios que se está consolidando en el mercado de Chicago.
En efecto, las buenas condiciones de los cultivos y el adelantamiento del comienzo en la etapa de espigazón influyeron en la baja de U$ 25 por tonelada que se registró en el mercado: hoy cotiza a U$S 185 la posición julio y para mayo 2025, el cereal está cotizando a U$S 160.
En el Matba-Rofex, el mercado local mantiene una tendencia sostenida con muy pocos cambios entre las posiciones: julio 2024 cotizando a U$S 175,5, mientras que para mayo 2025 el precio es de U$S 176, una ligera suba de U$S 0,5 por tonelada.
En el caso de la soja, la condición bueno-excelente llega al 77%, con un estado excelente en el 12 % y bueno en el 55%; mientras que a igual fecha de la campaña anterior llegaba al 50 %: 6% excelente y 44% bueno.
Este diferencial entre una campaña y otra es el principal factor que está impactando en la baja de los precios de la oleaginosa. Se agrega como factor bajista el rápido avance en la evolución de las etapas del cultivo, con 20% en prefloración contra 8% a igual fecha del año pasado.
En el caso del precio, en Chicago la tendencia es superbajista, con una caída de los precios de U$S 40 entre el 24 de mayo (U$S 456,7) y el 28 de junio (U$S 416,3). A partir de fines de junio, el mercado de soja confirma un cambio de tendencia, subiendo U$S 9 dólares entre el 28 de junio y el 3 de julio.
Este cambio de dirección en los precios se debe a informes de consultoras privadas que proyectan un mayor consumo de aceite de soja para el mercado interno de Estados Unidos.
Si analizamos el precio entre posiciones futuras cercanas y el futuro 2025, vemos que la soja en Chicago consolida una baja de U$S 10 entre la posición julio 2024 (U$S 432) y la posición mayo 2025 (U$S 422).
En cambio, en nuestro mercado –y aquí viene el dato a tener en cuenta–, la soja de la nueva cosecha mayo 2025 (U$S 294) confirma una caída de U$S 24 con respecto a la posición julio 2024 en el Matba (U$S 318).
Esta gran diferencia en contra entre el precio de la soja nueva y la soja disponible se debe a lo siguiente: en la actualidad el margen de molienda de la industria aceitera es negativo: por eso la industria prefiere sobre pagar por la soja disponible, en la búsqueda de sacrificar margen para conseguir volumen.
En cambio, para la nueva cosecha, la industria aceitera está a dispuesta a pagar por la soja el precio suficiente para no perder plata. Es decir, el margen de procesamiento de soja futura está condicionando el precio que pueden pagar las aceiteras.
Mientras tanto, los productores argentinos hoy cobran por su soja U$S 110 menos que el precio de la soja que reciben los brasileños. Hoy la soja disponible cotiza en argentina a U$S 316 mientras que en Brasil el precio de la soja cotiza a U$S 426.
Esto sucede a pesar de que el descuento del precio de la soja argentina FOB urpiver (U$S 438) contra el FOB Santos en Basil (U$S 433) es de apenas U$S 5.
La gran diferencia entre un mercado y otro son las retenciones.
