Esta semana se consolidó una tendencia bajista en el tipo de cambio, tanto en los dólares oficiales como en el blue.
El dólar oficial Banco Nación, para la divisa comprador cotizaba a $ 1.115, el dólar blue a $ 1.150, el MEP $ 1.150, el CCL $ 1.160. La brecha entre el blue y el dólar oficial es apenas del 3%, incluso esta semana llegamos a ver que el dólar “paralelo” cotizaba por debajo del dólar oficial.
El dólar comienza a ser otro de los principales factores referentes del mercado, además del precio de las commodities que cotizan en dólares. También esta semana se produjo una caída en los precios FOB de exportación en los puertos argentinos.
La baja en el FOB no tuvo el mismo efecto bajista sobre las cotizaciones en dólares que cotizan en los futuros A3 (ex-Matba-Rofex).
Por caso, el maíz acusó ligeras bajas en el mercado interno mientras que la soja reaccionó con subas. Los mercados están muy desorientados, pues en las cotizaciones de hoy en el mercado de futuros no está muy claro cuál es el nivel de retenciones que están tomando en cada uno de las commodities, considerando que el 30 de junio vence el plazo que reduce temporalmente las retenciones. Y todo esto influye en los precios de paridad o FAS teórico que deberían pagar los exportadores.
Por ejemplo, el precio FAS teórico del maíz hoy es de U$S 162 considerando un precio FOB Upriver para embarque septiembre de U$S 197, de acuerdo con el informe de la Bolsa de Comercio de Rosario. En cambio, el FAS real (precio de mercado en los futuros A3) es de U$S 180.
Esto quiere decir que los exportadores están pagando U$S 18 por arriba de la paridad teórica; traducido, están perdiendo plata.
Veamos cómo está la posición comercial de los exportadores. Hasta el 30 de abril los exportadores declararon compras por 14,260 millones de toneladas, de los cuales 9,078 millones de toneladas se compraron a precio y 5,382 millones de toneladas fueron compras a fijar.
Del total de compras a fijar ya se fijaron 1,130 millones de toneladas y en consecuencia quedan por fijar precio 4,251 millones de toneladas.
Sumando las compras a precio de las compras ya fijadas se llegan a un volumen total de 10,208 millones toneladas, mientras que hay 9,890 millones de toneladas de declaraciones juradas de ventas al exterior (DJVE).
La posición neta de los exportares es entonces de 318,000 toneladas long, sobre compradas. Esto significa que toda nueva venta de los exportadores debería ser cubierta con nuevas compras en el mercado doméstico. Si bien en las ultimas dos semanas las DJVE llegaron a 10,978 millones de toneladas, un aumento de 1,833 millones de toneladas.
Siguiendo el mismo patrón de ventas de los productores estimando 800 mil toneladas en la primera semana de mayo, la posición de la exportación seria de un millón de toneladas short, es decir sobrevendidas que deben ser cubiertas por los exportadores.
Este puede ser el factor alcista que está influyendo en los mercados de maíz tanto disponible como futuros A3.
En el caso de la soja el margen de molienda con las retenciones reducidas en forma temporal se puede considerar neutros a ligeramente positivos. En cambio, si tomamos el regreso de las retenciones al nivel anterior de 31% para aceite y harina de soja, los márgenes son negativos en U$S 35 y el precio teórico de compra de la industria aceitera debería ser de U$S 245 contra un mercado que cotiza a U$S 280.
Sorprende que se sostengan estos márgenes negativos, a menos que el Gobierno decida prorrogar la baja temporaria de la soja y del complejo aceitero (harina y aceite de soja). Este es sin dudas el principal factor que tendrá impacto directo sobre el comportamiento del mercado de soja, cuando se sepa si el 30 de junio caduca la disminución temporal de las retenciones o si se prorroga.