En un mercado de maquinaria agrícola deprimido y plagado de incertidumbres, la fábrica nacional de tractores Pauny redobla su apuesta tecnológica.
La empresa ubicada en Las Varillas anunció dos nuevos lanzamientos de tractores, el modernizado Evo y el prototipo Vectron, que se sumarán a la oferta de productos en los próximos meses.
“Apuntamos a ofrecer tecnología y prestaciones superiores en un contexto donde el productor exige mayor confort y comodidades equiparables a las de un vehículo particular”, destacó a La Voz Raúl Giai Levra, presidente de la empresa cordobesa, la cuarta marca en ventas de tractores a nivel nacional.
El modelo EVO presenta una modernización significativa. Los cambios incluyen no solo su estética, sino también el chasis, su potencia abarca entre los 250 y los 280 caballos de fuerza (HP) en dos modelos. Dispone de toma de fuerza independiente y acople electrónico, lo que marca una diferencia respecto de los modelos anteriores.

Giai Levra señaló que la potencia de 180 HP es, en general, la línea de tractores más vendida y adecuada para la siembra directa. Pauny espera que esta modernización satisfaga las demandas del sector. Las entregas de este modelo están previstas para comenzar a fines de año, ya que se está preparando la matricería definitiva para procesos más ágiles.
El Vectron, actualmente un prototipo en pruebas de homologación, pertenece al segmento de alta potencia. Es un tractor de cuatro ruedas iguales con chasis rígido, pero capaz de tener aplicaciones similares a un tractor articulado. Su tracción es 50/50, a diferencia del convencional 70/30. Esto le otorga mayor potencia de tiro, asemejándose en el arrastre a un tractor de 240 HP, aunque su potencia nominal es de 200 HP, logrando un menor consumo.
En cuanto a su dirección, posee tres modos de marcha: con eje direccional delantero, con los dos ejes direccionales (que le permiten un radio de giro de 4,20 metros), y la forma de tipo “cangrejo”, donde la rueda trasera no pisa el mismo surco que la delantera. Esta última aplicación es muy útil para reducir la pisada o para el pisado de silos, donde se necesita mayor superficie.

El Vectron incorpora una caja CVT inteligente. Esta transmisión permite al operador regular la velocidad de trabajo y las RPM deseadas. El tractor avanza o retrocede solo con la palanca de comando, sin necesidad de pisar ningún pedal, ya que la caja lo frena por sí misma. Esto se traduce en una maniobrabilidad importante y una economía de combustible que oscila entre el 25% y el 30%.
“El sistema está diseñado para que el implemento domine a la máquina (lo opuesto a la caja dominando al motor). Por ejemplo, en el caso de una enfardadora que pide más velocidad al haber poco pasto, el tractor está preparado para recibir y ejecutar esa orden para una mayor eficiencia”, indicó Giai Levra.
En su estrategia de innovar, Pauny desarrolló esta aplicación junto con la multinacional italiana Dana, que fabrica cajas de trasmisión para equipos de carga portuaria y que con la empresa cordobesa incursionó en el desarrollo para uso agrícola. Ya había provisto la caja de transmisión para el tractor Bravo 7710.
Luego de las pruebas de homologación en el campo, se espera que el Vectron esté disponible y se realice el lanzamiento oficial a partir de la edición 2026 de Expoagro.
Sin créditos, ventas deprimidas e importación
La apuesta a futuro de Pauny se da en un contexto de un mercado interno “muy deprimido”, admite Giai Levra que, a su juicio, demanda “apretar los dientes”, seguir para adelante y estar preparado para cuando el escenario cambie de tendencia.
“El consumo ha caído considerablemente. El mercado de tractores en el país debería rondar las ocho mil unidades anuales, pero actualmente solo alcanza las seis mil”, observa el empresario.

Entre los factores que impulsan la caída en las ventas, Giai Levra identifica la falta de financiamiento. Este año, el crecimiento en las ventas se dio únicamente en el primer trimestre, cuando en marzo, durante Expo Agro, los bancos ofrecieron tasas de interés que fueron de la conveniencia de los productores.
Luego, en los meses sucesivos, el nivel de ventas se desplomó cuando el productor, en la búsqueda de créditos similares, se encontró con tasas que subieron hasta el 70%, lo cual hace insostenible cualquier operación, sostiene el empresario.
De haber producido dos mil tractores en el año 2013, la empresa cordobesa hoy está en una cifra que ronda la mitad, con una dotación de 550 trabajadores que se mantiene en su totalidad.
Para colmo, la importación de tractores en un mercado que está deprimido en cuanto a ventas preocupa a toda la industria nacional.
Al respecto, Giai Levra mencionó un estudio de la fábrica de motores Cummins que reveló que, en los primeros seis meses, ingresaron al país 852 tractores chinos, provenientes de 36 marcas diferentes. Si bien la mayoría son de baja potencia, “hay de todo”, destacó el empresario.
La oferta importada, a precios muy competitivos, trae consecuencias negativas sobre la industria nacional, que está obligada a desempeñarse con costos elevados y en un mercado donde la porción de las marcas se ha reducido de manera significativa.