Mientras cae el ingreso de camiones a las principales terminales portuarias por el paro de transportistas de carga que reclaman actualización de tarifas y por el faltante de gasoil, el Gabinete del gobierno de Alberto Fernández celebró una reunión en la que se abordó el tema.
Sin embargo, pese a que semanas atrás dijo que el problema se resolvería “en 48 horas”, esta vez no habló de plazos.
En una rueda de prensa realizada tras la reunión en Casa de Gobierno, el jefe de Gabinete, Juan Manzur, se refirió a la crisis por el faltante de combustible.
“Lo que hoy se prioriza es traer energía para que la Argentina siga produciendo en función de la mayor demanda de energía”, sostuvo el funcionario.
Al trazar un panorama en ese sector, Manzur destacó que las cuatro refinerías existentes en el país “están trabajando al 100 por ciento para producir de gasoil”, y que “se han tomado medidas que tienen que ver con la suspensión temporaria de impuestos”.
Además “están en curso cinco barcos con importación de gasoil y se tomó la medida de aumentar el corte del biodiesel. Con estas acciones se va ir normalizando la provisión de combustible a lo largo y ancho del país”, aseveró.
El jefe de gabinete agregó que contribuirá a revertir la escasez el aumento del corte de biodiésel con gasoil, que pasó del 5% al 12,5% y estará vigente en la primera quincena de julio, y la suspensión temporal de los impuestos a su importación.
En el país los problemas para acceder al gasoil tienen lugar en 23 provincias, según el último estudio de la Federación Argentina de Entidades Empresarias del Autotransporte de Cargas.
Las protestas han retrasado el ingreso a los puertos de más de 350.000 toneladas de granos por unos 200 millones de dólares, según la Cámara de la Industria Aceitera y el Centro de Exportadores de Cereales.
Repudio
Según consignó la agencia Télam, Manzur también transmitió que en la reunión del gabinete hubo un “repudio unánime y absoluto a los hechos de violencia y agresión” ocurridos recientemente en las rutas, que derivaron en la muerte del camionero Guillermo Andrés Jara, de 45 años, cerca de la localidad bonaerense de Daireaux, cuando fue agredido a pedradas por querer evitar un piquete de transportistas que protestaban por la falta de gasoil.
