El arranque de la campaña 2020/2021 en materia de exportaciones muestra un mejor desempeño de los productos son agregado de valor. Según un informe de la Bolsa de Comercio de Rosario.
En abril y mayo, las ventas al exterior de harina desoja alcanzaron a 5,6 millones de toneladas, 400 mil más que en igual período del ciclo anterior, cuando llegaron a 5,2 millones de toneladas: 7,7 por ciento más.
En el caso del aceite de soja, el desempeño es similar, aunque con un leve crecimiento –3,41 por ciento– en la actual campaña: 1,21 millones de toneladas, contra 1,17 millones de toneladas en 2020.
En cuanto a productos primarios, en los primeros tres meses de la campaña (marzo a mayo) se enviarían al exterior 8,4 millones de toneladas de maíz (para mayo se considera lo ya embarcado y lo programado para embarcar), mientras que en el mismo período del año anterior los embarques alcanzaron 10,1 millones de toneladas. Equivale a 17 por ciento menos.
Por su parte, los despachos de poroto de soja registrarían una caída, ya que entre abril y mayo de este año sumarían 300 mil toneladas, mientras que el año pasado totalizaron 1,4 millones de toneladas en el mismo período. Representa una caída del 78 por ciento.
Según el informe, el mayor volumen de embarques de derivados de soja responde a la mejora en los precios de exportación, particularmente del aceite de la oleaginosa, que repercutió favorablemente en el margen bruto.
Nivel de actividad
“Como consecuencia, el nivel de crushing aumentó en abril a 4,2 millones de toneladas, un 24 por ciento encima de lo industrializado en marzo y un 15 por ciento arriba del volumen procesado en abril del 2020”, precisa el informe.
Se trata del mayor volumen mensual desde julio de 2019, y el segundo tonelaje más elevado para un mes de abril en la historia, sólo detrás de lo procesado en aquel mes de 2015.
La producción de aceite obtenida alcanzó así 843.700 toneladas, mientras que el volumen de pellets/expellers de la oleaginosa conseguido sumó 3,1 millones de toneladas.
